¿Por qué Zegona lanza una OPA parcial sobre Euskaltel?
Opar para perder menos y justificar su existencia. Zegona Communications, un vehículo de inversión creado para invertir en empresas de medios y telecomunicaciones, ha presentado una oferta de compra parcial sobre el 14,9% de las acciones de Euskaltel a 7,75 euros por acción. Las acciones de la operadora subieron este viernes un 13%, hasta 7,5 euros.
Para el grupo británico, las cosas no marchan bien desde que hace un año entró en el capital de la empresa vasca, su único activo en cartera y la razón de que siga existiendo. El objetivo de Zegona es resucitar su inversión en Euskaltel, que cotiza un 30% por debajo del precio al que suscribió (9,5 euros) sus acciones en la operadora.
La oferta ofrece una prima del 17,7% respecto al cierre de ayer de la operadora y sitúa la cotización de la empresa vasca en positivo en 2018. Euskaltel tiene a Kutxabank como primera accionista, con el 21% de las acciones, mientras Zegona, con el 15% de la operadora vasca, es el segundo y Corporación Alba, con el 10%, el tercero.
¿Quién está detrás de Zegona?
Con esta operación, Zegona alcanzaría el 29,9% del capital, el límite que le obligaría a lanzar otra OPA sobre el 100%. No quiere sobrepasar ese porcentaje y no lo hará, pero sí busca ganar poder y presencia en el consejo de administración, según Eamonn O’Hare, presidente de Zegona. El importe de la OPA parcial asciende a 206 millones de euros y supondrá la adquisición de unos 26,6 millones de acciones de Euskaltel.
Zegona, que cotiza en la Bolsa de Londres, ha anunciado que ampliará capital en 225 millones de euros para poder afrontar la operación. Sus principales accionistas son tres grandes gestoras de fondos como Marwyn (25%), Fidelity (10%) o Invesco (17%), que controlan más de la mitad de las acciones. Capital Group (7,8%) es a la vez otro de los acccionistas de referencia en Euskaltel con el 5% de las acciones.
Después de fracasar ante Másmóvil en la subasta de Yoigo durante 2016, Zegona se vio arrinconada en el escenario de telecomunicaciones en España pese a contar con activos regionales como la asturiana Telecable. En 2017 optó por vender la empresa a Euskaltel a cambio de unos 640 millones en efectivo y acciones que le dieron el 15% que tiene en la operadora naranja. Sin embargo, su inversión no ha terminado de funcionar y las minusvalías crecientes le han llevado a mover ficha.
