¿Qué suponen los últimos movimientos en renta fija?
Después de la volatilidad que hemos visto estas últimas sesiones en el mercado de bonos, Andrea Ianelli, director de inversiones en renta fija de Fidelity International, analiza la situación y explica por qué "no estamos" ante "la gran oleada de ventas generalizadas":
"Los movimientos que se han observado en los
mercados de renta fija durante los últimos días responden más
a factores técnicos que a fundamentales.
El
aumento de la incertidumbre en torno al programa de relajación
cuantitativa del BCE tras la rueda de prensa de la semana
pasada, la supuesta intención del Banco de Japón de
incidir en la forma de la curva de rendimientos y una nueva
avalancha de papel tras el parón veraniego han tirado al
alza de los rendimientos y elevado las curvas.
Las
valoraciones están ahora en mayor sintonía con los
fundamentales, después de dejar atrás unos niveles que cabía calificar
de caros. Sin embargo, no estamos ante el “Big One”,
esa gran oleada de ventas generalizadas de bonos de la que algunos
inversores llevan hablando varios años. Volviendo a los fundamentales,
seguimos estando en un entorno de crecimiento e inflación
bajos. Por lo tanto, los bancos centrales se mantendrán
activos, lo que dejará poco margen para subidas significativas de los
rendimientos desde los niveles actuales.
En Europa, el BCE pronto tendrá que lidiar con
problemas de escasez de bonos y ya está
replanteándose su marco de relajación cuantitativa. Eso no significa
que esté arrojando la toalla, como la reacción del mercado parece
sugerir, sino lo contrario, que está estudiando formas de
aplicar más estímulos, no menos.
En
EE.UU., los últimos datos publicados apuntan a que
la economía se mantiene en una senda de recuperación
gradual, por lo que la Fed será reacia a poner palos en las
ruedas. Por lo tanto, cabe pensar que el ritmo de subidas de
tipos será lento y cauteloso.
Y por último,
pero no menos importante, el Banco de Japón probablemente será
el primero en forzar los límites de la política monetaria no
convencional, ya que tiene que conjugar un entorno
macroeconómico difícil con el impacto negativo que tienen las curvas
planas y los rendimientos negativos sobre el sector financiero y el
sistema de pensiones. Estoy seguro de que la reunión del banco central
nipón de la próxima semana estará marcada en rojo en las agendas de
muchos otros bancos centrales.
Un mayor activismo de los
bancos centrales no significa menos volatilidad en el futuro, como los
mercados se encargan de recordarnos tan a menudo. Los
inversores que buscan rentas están viéndose obligados a asumir más
riesgo, tanto en duración como en el plano crediticio, lo que
puede derivar en posicionamientos masificados en unos mercados en los
que la liquidez no es tan abundante como en el pasado. La
diversificación sigue siendo, pues, la última línea de defensa en este entorno".
Esta información se dirige únicamente a profesionales de la
inversión y no debe ser utilizada por inversores privados.