Review profesional
Publicado hace 1 mes
“¿Crédito con caducidad... o con trampa?
El Carmignac Credit 2031 tiene una estructura robusta, una gestión profesional y una rentabilidad prometedora… pero el contexto global no acompaña. El riesgo de impago aumenta en entornos de bajo crecimiento y alta deuda, y si además el fondo se ve afectado por países emergentes que sufran una desaceleración comercial, el panorama se complica.

hay varios elementos que invitan a ser más prudentes.

-->Riesgo sistémico por alto endeudamiento
Vivimos en un momento en el que el endeudamiento global está en máximos históricos. Gobiernos, empresas y hogares arrastran niveles de deuda elevados, y tanto el FMI como el BIS han lanzado advertencias sobre una posible “crisis de deuda silenciosa”. En ese escenario, los fondos centrados en deuda corporativa, especialmente con exposición a emisores de menor calidad (como este fondo, con rating medio BBB‑), podrían ser vulnerables ante episodios de impago o fuerte repunte de los spreads de crédito.

-->Menor crecimiento global por tensiones geopolíticas
Las políticas arancelarias que están resurgiendo en EE. UU. bajo el liderazgo de Trump están generando un enfriamiento del comercio global. Esto impacta directamente a los países emergentes, en los que este fondo tiene una exposición significativa. Si las exportaciones se reducen, se ve afectado el crecimiento, los beneficios empresariales y la capacidad de devolución de deuda. En definitiva: menos comercio, menos caja, más impagos.

-->Entorno delicado para el high yield
Aunque el fondo tiene una parte importante de su cartera en grado de inversión, también se apoya en bonos high yield y CLOs para aumentar rentabilidad. Pero en un escenario de menor actividad económica global, estos activos se vuelven frágiles. Ya en 2008 y más recientemente en 2020 vimos cómo el high yield puede convertirse rápidamente en “high risk”.
luis9744669...

Creo que tu comentario simplifica en exceso el fondo Carmignac Credit 2031 y transmite una visión distorsionada del riesgo real que asume este fondo. No estamos ante un fondo puramente high yield, como sugieres; de hecho, su rating medio es BBB‑, lo que lo sitúa en el límite de Investment Grade, y más de la mitad de su cartera (54,7 %) está compuesta por bonos con calificación AA, A o BBB, mientras que el resto incluye bonos de menor calidad (BB, B, CCC) y CLOs (20,9 %) que en muchos casos están estructurados con tramos AAA o AA, por lo que no son tan arriesgados como parecen si se analizan en detalle. Atribuirle una exposición significativa a emergentes tampoco es preciso: el fondo tiene un 73,8 % invertido en Europa, y solo un 21 % en corporativos de países emergentes, diversificados por región y sector. Decir que este fondo es vulnerable a cualquier ralentización económica global es cierto, como lo sería para cualquier producto de renta fija corporativa, pero el análisis debería ir más allá: este fondo está diseñado con una estrategia de “carry” estructurada, con vencimiento objetivo en octubre de 2031, lo que permite al inversor tener visibilidad del horizonte temporal, cobrar cupones y no estar expuesto a la volatilidad de mercado como en un fondo abierto o perpetuo. Además, la diversificación es muy elevada (más de 139 emisores), lo que mitiga el impacto de posibles impagos individuales, y el YTM del 5,6 % ofrece un colchón frente a escenarios moderadamente adversos. Por último, no se puede olvidar que se trata de un fondo gestionado activamente por un equipo experimentado, con criterios ESG aplicados al 100 % de la cartera, y con un enfoque profesional en la selección de crédito, lejos de una estrategia pasiva de alto riesgo. En resumen, aunque el fondo no está exento de riesgos —como cualquier producto de crédito corporativo—, catalogarlo directamente como high yield sin matices, alertar de forma genérica sobre el contexto macro sin entrar en la composición real del fondo, y no valorar su estructura a vencimiento ni su estrategia activa, me parece una visión incompleta y poco rigurosa. - hace 26 días