Los bancos centrales serán decisivos en la evolución de los mercados en 2026
Las altas valoraciones en bolsa y la concentración de las subidas especialmente en el sector tecnológico acaparan buena parte de los análisis, pero los expertos de MAPFRE apuntan otro factor crucial: la política de los bancos centrales. Con la Fed ante una nueva bajada de tipos y un probable reemplazo en su presidencia, y un Banco Central Europeo que podría tomar el camino contrario si el crecimiento económico es mayor al esperado, la política monetaria podría ser decisiva en los mercados de divisas, deuda y renta variable.
En declaraciones de este miércoles, previas a conocer la decisión final de la Fed, el director adjunto de Estrategia de MAPFRE AM, Ismael García Puente, ha afirmado que el mercado ya descuenta una rebaja de 25 puntos básicos, tras semanas de dudas en las que no estuvo claro. Como contrapunto, se espera que el presidente de la Fed, Jerome Powell, tenga un tono más duro en su comparecencia, rebajando la expectativa de las bajadas para el año que viene y subrayando su habitual mensaje de aguardar a la evolución de las cifras macro antes de nuevos movimientos.
El probable golpe de mano de Trump
Y, en medio de estas idas y venidas con respecto a la posibilidad de nuevos recortes del precio del dinero, que podrían conllevar volatilidad, Ismael García recuerda que “es probable” que Donald Trump anuncie en breve el reemplazo de Powell, a quien sustituiría por un candidato más afín a sus ideas y más proclive a las bajadas de tipos.
A corto plazo, una política monetaria más agresiva en su camino a la baja no tendría por qué tener un impacto negativo en los mercados; de hecho, los activos de riesgo suelen acoger con subidas estas medidas, que se traducen en una financiación más barata para las empresas. Pero sí podría tener un gran impacto en la inflación, que se vería alimentada por rebajas excesivas. La inflación ya se encuentra en torno al 3% en EEUU, con un crecimiento económico del país del 2%, unos niveles con los que no serían adecuados los tipos de interés al 1%, la cifra que Trump ha dicho públicamente que desea.
A esa disyuntiva entre promover el crecimiento y controlar la inflación al que se enfrenta la Fed, el directivo de MAPFRE AM añade otro factor de la economía norteamericana, el mercado laboral. Y es que, aunque “por ahora no es preocupante”, el empleo en Estados Unidos ya ha empezado a dar señales negativas. Ya se han visto despidos en las grandes empresas por la implementación de la IA, y ahora se comienzan a dar recortes entre las pequeñas y medianas empresas.
Europa, más crecimiento que llevaría al BCE a mover ficha
En Europa, Ismael García cree que las cifras de crecimiento económico pueden “sorprender al alza”, una buena noticia que, no obstante, podría llevar al Banco Central Europeo a subir los tipos de interés. Y esto, en un momento de problemas fiscales para países como Francia o Alemania, significaría mayores apuros para estas naciones.
El experto ve la inflación en Europa controlada, y con una tendencia positiva, porque las tensiones arancelarias están llevando a China a desviar productos que antes comercializaba en Estados Unidos, y a precios muy bajos. Así, Europa está “importando deflación”, explica Ismael García, por lo que, salvo “sustos” en los costes energéticos, los precios seguirán estables.
En lo relativo a los mercados, García Puente afirma que entre los inversores hay apetito por la renta variable europea, aunque matiza que esta de debe a la intención de diversificación y no tanto a la creencia de que batirá a la estadounidense. Europa parte de “valoraciones atractivas”, explica, y si crece económicamente puede “recuperar el brío” en bolsa. Pero, a largo plazo, la visión de MAPFRE es “más constructiva” en renta variable americana que europea.
En cuanto a la evolución de las divisas de ambos lados del Atlántico, el consenso apunta a que puede seguir cayendo el dólar, una tendencia que se vería acentuada si efectivamente la Fed baja más los tipso de interés y el BCE los sube, por lo que los analistas estarán “muy pendientes” de los bancos centrales, asegura Ismael García. Pese a estos movimientos, si atendemos a los flujos de capitales, que en la primera mitad de año registraron importantes salidas de EEUU, el experto señala que estos “ya se han calmado”.