Fallece el mítico Charlie Munger, el genio de la inversión que evolucionó a Warren Buffett
Ha sido la amistad más rentable de la historia. Una sociedad que parecía eterna. A apenas un mes de cumplir los 100 años, Charlie Munger, uno de los grandes genios en la historia de la inversión, ha fallecido.
Suele decir su socio, Warren Buffett, que a lo largo de su vida había tenido la fortuna de encontrarse con personas brillantes que fueron claves para su progresión como persona y como inversor. Y, sin duda, la más importante de todas fue conocer a Charlie.
Más de 50 años trabajando juntos en su sociedad Berkshire Hathaway. Una conexión muy especial desde que un amigo común les presentó. Una pasión total por el análisis de empresa y un hobbie compartido: la lectura empedernida.
Fue Munger quien convenció a Buffett de evolucionar en su estilo inversor, de pasar de buscar "colillas", empresas a precios de derribo aunque no fueran grandes negocios, a centrarse en negocios más sólidos, aunque las valoraciones no fueran tan a precio de ganga. Valores como los que ahora pueblan su cartera y con los que han labrado su impresionante éxito inversor.
Ya no volverán a compartir mesa en el Century Link de Omaha, ya no responderán más juntos durante más de 5 horas a los más de 40.000 fans que cada año viajaban hasta la conferencia anual de Berkshire para aprender de su sabiduría.
He tenido el privilegio de asistir allí 3 veces y escucharles en directo, de ver su complicidad, de aprender de Charlie... Apunté decenas de frases, algunas de las cuales compartí junto al gran Carlos Alosete en este simpático vídeo.
Además de la del vídeo, hoy quiero añadir otras dos que me gustaron especialmente y que le escuché en directo en Omaha:
- "Juega con las cartas que te han tocado", que respondió Charlie Munger a un chaval que le preguntó una vez qué podía hacer para tener éxito en la vída, pues procedía de una familia normal sin contactos en el mundo de los negocios.
- "En la inversión, como en el matrimonio, la clave para tener éxito es tener bajas expectativas".
Descansa en paz, Charlie, te lo has ganado pero bien.
