!SUERTE O HABILIDAD!

Fin de año. Es hora de reflexionar. Sus resultados, seguramente, habrán sido buenos pero ¿cómo de buenos? Alguien le preguntó a un amigo que si su novia era inteligente y la contestación fue ¿en comparación con la de quién?  Sabia respuesta, el hombre tiende a comparar sus logros y sus posesiones con los de los demás y tendemos a cierta sensación de infelicidad al creer que siempre hay otros que lo han hecho mejor. En un buen año de Bolsa nuestras rentabilidades habrán dependido del grado de exposición a la Renta Variable y, como no, del “acierto” a la hora de elegir nuestros fondos y acciones.

Llegados a estas fechas me planteo si realmente las rentabilidades de mi cartera han sido fruto de la suerte o de la habilidad, mía, a la hora de elegir los fondos y/o acciones y por partida doble, de los gestores de los fondos a la hora de asignar mi capital. Si sacara conclusiones únicamente en función de las rentabilidades obtenidas sería un necio, pero es evidente que lo más visible son los números ya que el proceso de los gestores, la estrategia de largo plazo, en muchas ocasiones, permanece oculta y no es visible en el corto plazo.

En un partido de futbol Barcelona contra Madrid, en el que las fuerzas están parejas y las habilidades son muy similares, el factor determinante en el resultado a un solo partido es la suerte. En cambio en un Barcelona contra Villanueva de Abajo la suerte no interviene para nada y la habilidad influirá al 100 % en el resultado. En esta comunidad de gente muy formada donde se desgranan innumerables fondos de calidad es evidente que en el corto plazo (a partido único) los resultados anuales serán fundamentalmente determinados por el azar y, perseguir y mover nuestros fondos hacia aquellos que mejores plusvalías han obtenido no será racional porque en aquellos procesos en los que influye fundamentalmente la suerte hay una fuerte tendencia a la reversión a la media y aquellos que lo han hecho mejor este año es más probable que sean los que peor lo hagan en el año siguiente. No caiga en el sesgo de la inmediatez y sea paciente con sus gestores si este año no han estado “acertados”. El que su fondo haya perdido o ganado alguna estrella Morningstar no le dará la información que precisa y que no es otra que conocer el proceso inversor de sus gestores.

Por otro lado los gestores tienden a adoptar decisiones muy similares a las del resto de colegas en lo que podríamos llamar sesgo de conformidad o de rebaño, ya que estar con la mayoría defiende el puesto de trabajo y tener resultados muy dispares con los del resto de fondos (incluso aunque sean mejores) genera inquietud entre las entidades financieras.

No es fácil aprender a vivir con la suerte cuando ésta dicta los resultados y me atrevería a decir que, aparte de no ser fácil, es muy peligroso.

Los resultados de su cartera en el año 2013 ¿han sido consecuencia de la suerte o de la habilidad?  Si ha sido la habilidad, incluso aunque haya perdido dinero este año, le felicito porque usted ganará mucho en los próximos años o, si pierde, perderá menos que aquellos que este año han jugado a los dados.

¡Feliz 2014!, amigos.