Me alegro de invertir en fondos y no en acciones
Acabo de llegar apesadumbrado de la casa de un buen amigo. Su mujer me ha llamado a eso de las 20.00, acababa de llegar de correr. Me ha dicho a ver si podía pasarme, que hoy por la mañana su marido había tenido un susto, algo así como un medio infarto y que le vendría bien algo de ánimo (nos conocemos desde los 11 años). Cuando le he preguntado qué le había pasado, me ha respondido algo así como: "Creo que tiene que ver con algo de las malditas acciones."
He llegado a su casa. Estaba en el cuarto de estar, sentado, viendo las noticias de la sexta. "¿Qué te ha pasado?" Después de mirarme por encima del hombro para comprobar que no estaba su mujer, va y me suelta: "Abengoa". Y me empieza a explicar un jaleo que no he entendido, bueno sí, que después de tres días de bajadas ha perdido un pastizal. No sé qué de recapitalización de la empresa por 1200 millones, que si accciones A, que si acciones B, que si las manos fuertes/agresivas/ofensivas van a hundir la empresa. Le he recordado que es un inversor de toda la vida, que no es para tanto, que igual mañana empiezan a subir, el consabido que si no vende no pierde. Nada, no lo he consolado. "Estaban a 0.90 y han acabado hoy a 0.27" repetía una y otra vez.
Mi amigo, hace tres años, cuando le dije que iba a empezar a invertir en fondos de inversión, me dijo que era un error, que mejor en acciones. Si inviertes en acciones el gestor eres tú. Tu eliges las empresas, cuándo compras, cuándo vendes, al instante. Con los fondos no controlas, emcima pagas para que te inviertan tu dinero.
Y tenía razón, cuando inviertes en acciones eres el gestor, pero también el que se lleva todos los disgustos, el que está todo el día colgado del ordenador y con un busca en el cinturón como un médico de guardia.
Me alegro de invertir en fondos de inversión gestionados por buenos profesionales, de mirar la cartera dos o tres veces al año, de vivir más tranquilo.
