La Fed sube los tipos: ¿y ahora, qué?
La guerra en Ucrania no ha cambiado la hoja de ruta de la Reserva Federal de Estados Unidos. Este miércoles, el organismo anunció una subida de los tipos de interés del 0,25%, la primera desde 2018, y anticipó más subidas para el resto del año con el objetivo de intentar controlar la inflación, que en Estados Unidos llegó al 7,9% en febrero, su nivel más alto desde 1982.
El presidente de la Fed, Jerome Powell, señaló ayer que tienen un plan de subidas constante para todo el año, pero que, si tienen que acelerar su hoja de ruta, lo harán. En concreto, se esperan otros seis incrementos más para este año y otros tres o cuatro para 2023, de forma que los tipos se sitúen en el entorno de 1,75% y el 2% al finalizar 2022.
El objetivo de Powell es luchar contra la escalada de la inflación, que se ha tensionado más por el alza de los precios de la energía y las materias primas. Y, por ello, destacó que “sin la estabilidad de precios no puede haber un periodo sostenido de máximo empleo” y que el plan de la Fed es restaurar la estabilidad de precios y al mismo tiempo mantener un mercado laboral fuerte, porque recordemos que la Fed tiene ese doble objetivo.
¿Cómo ha reaccionado el mercado?
Los mercados ya habían descontado este primer movimiento de la Fed. El miércoles, Europa cerró con fuertes subidas antes de conocer las decisiones de la Fed y Estados Unidos sí pudo digerir la noticia y terminó la sesión con incrementos del 1,55% en el Dow Jones, del 2,24% en el S&P 500 y del 3,77% en el Nasdaq Composite.
Y, este jueves, los índices europeos se están moviendo con más de prudencia, hemos visto subidas que rondan el 0,50% y también ligeros descensos, y muy pendientes de lo que pueda pasar en las negociaciones entre Rusia y Ucrania.
En este sentido, ¿qué podemos esperar de los mercados? ¿Dónde podemos invertir?
Manuel Rodríguez Torrecillas y Laeticia del Campo, selectores de fondos en Abante, estuvieron hace unos días en un Finect Live, hablando con Vicente Varó, director de contenidos de Finect, de cómo construir una buena cartera de inversión en este entorno de mercado.
Así, recordaron que la volatilidad, que en las semanas anteriores llegó a marcar niveles que no se veían desde 2020, es el peaje que hay que pagar para tener buenas rentabilidades a largo plazo. Y que, aunque nadie tiene la bola de cristal, la clave para invertir a largo plazo es contar con carteras muy globales y muy diversificadas, tanto por áreas geográficas, como por sectores, activos y estilos de gestión.
