Artículo de Joan Pons: Algunas consideraciones sobre el Impuesto de Patrimonio (Diari de Tarragona)
El Impuesto de Patrimonio se ha convertido en los últimos años en objeto de disputa política, por el debate sobre su conveniencia y el hecho de que, aunque se ejecute en todo el territorio nacional, su recaudación está cedida en un 100% a las Comunidades Autónomas y Diputaciones Forales, que son las encargadas de regular todo lo referente al mínimo exento, tipo de gravamen, deducciones y bonificaciones de la cuota, lo que provoca a su vez que existan diferencias sustanciales dentro del Estado. Por poner un ejemplo, este impuesto está bonificado al 100% en Madrid mientras que en Cataluña existe un tipo aplicable en progresivo aumento, hasta alcanzar un tipo marginal del 2,75%.