Letras del Tesoro: ¿cómo tributan en la declaración de la Renta?

Letras del Tesoro: ¿cómo tributan en la declaración de la Renta?

Las Letras del Tesoro se han popularizado en los últimos meses, gracias a que ofrecían unos intereses mayores a los de las cuentas remuneradas y los depósitos. Tras atravesar una travesía por el desierto, miles de ahorradores han comprado estos valores de renta fija a corto plazo emitidos por el Tesoro Público a lo largo del año debido a la rentabilidad que ofrecían sin asumir prácticamente riesgos. 

La popularidad de estos activos ha sido tan grande que se llegaron a producir colas en las puertas de las sedes del Banco de España para lograr participar en la subasta. También se llegó a colapsar la página del Tesoro Público.

Muchos particulares que no habían invertido nunca han decidido adentrarse por primera vez en el mundo la inversión con este producto. Por eso, desconocen cómo funciona la tributación de las Letras del Tesoro y cómo incluir estas inversiones en la declaración de la Renta.

Los inversores que hayan comprado Letras del Tesoro tienen que tener en cuenta que deben pagar impuestos por las ganancias logradas. Los ciudadanos que hayan adquirido estos activos durante 2023 deberán tributar por los rendimientos obtenidos e incluirlos en la declaración de la Renta.

"La diferencia entre el importe obtenido en la venta o amortización de la letra y el pagado en su compra tiene la consideración de rendimiento de capital mobiliario sujeto al IRPF", explica el Tesoro Público en su página.

El año pasado había que incluirlo en la casilla número 30 de la declaración de la Renta, que llevaba por nombre ‘Rendimientos procedentes de la transmisión o amortización de Letras del Tesoro’. Sin embargo, los números de las casillas de la declaración pueden variar entre un ejercicio fiscal y otro.

¿Cuántos impuestos hay que pagar por las Letras?

Estos son los tramos del IRPF en función de las ganancias obtenidas:

  • Hasta 6.000 euros: 19%.
  • Entre 6.000 y 50.000 euros: 21%.
  • Entre 50.000 y 200.000 euros: 23%.
  • Entre 200.000 y 300.000 euros: 27%.
  • Más de 300.000 euros: 28%.

Este contenido se ha elaborado bajo un criterio editorial y no constituye una recomendación ni propuesta de inversión. La inversión contiene riesgos. Las rentabilidades pasadas no son garantía de rentabilidades futuras.


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