Vídeo - Los beneficios de las aportaciones periódicas -
Aula Financiera
¿Cómo nos ayudan las aportaciones periódicas a mitigar el riesgo de mercado?
Todo inversor en renta variable suele enfrentarse a distintos miedos. Hoy trataremos de abordar las dudas que padece el inversor respecto a si está invirtiendo en el momento adecuado. Para ello, analizaremos brevemente el sesgo de los inversores y las consecuencias que genera la parálisis. Posteriormente, trataremos de explicar como las aportaciones periódicas pueden ser nuestro mayor aliado.
Muchos inversores retrasan sus inversiones alegando tener dudas con frases como: “no se si es un buen momento” o “la bolsa ha caído (subido) mucho”. La realidad es que casi nunca parece que estemos en el “mejor momento” para invertir; siempre encontraremos una noticia en los titulares, un conflicto geopolítico o algún indicador que despierte nuestra preocupación.
Uno de los principales sesgos de los inversores es dejarse influenciar por sucesos pasados. En retrospectiva, todo el mundo sabe que en el 2007 no era buen momento para invertir y, que en abril de 2020 habría que haber invertido.
Las dudas suelen llevarnos a un estado de parálisis, lo que provoca retrasar, o incluso abortar, nuestras inversiones. Este aspecto es clave, ya que en renta variable el tiempo “juega en nuestra contra”. La tendencia alcista a largo plazo de la bolsa provoca que retrasar una inversión reduzca nuestra rentabilidad esperada.
Pese a la tendencia alcista a largo plazo, el riesgo de mercado existe, por lo que se genera un conflicto entre diferir la inversión y, -de media- perder rentabilidad esperada, o invertirlo todo en un momento determinado y asumir el riesgo.
Para solventar las dudas que sufre el inversor y mitigar el siempre perjudicial efecto de la parálisis, la estrategia basada en aportaciones periódicas es la clave. Esta estrategia, fue ideada por Benjamin Graham, reconocido como uno de los mejores inversores de todos los tiempos.
¿En qué consiste la estrategia?
El método de las aportaciones periódicas, como su propio nombre indica, implica invertir una cantidad de capital de forma consistente en intervalos de tiempo regulares (por ejemplo, cada mes), sin importar lo que esté sucediendo en los mercados. En lugar de adivinar el “momento perfecto”, el inversor compra sistemáticamente participaciones de un fondo.
De esta forma, el inversor, consigue mitigar parte del riesgo de mercado, ya que diversifica el precio de entrada. Además, contribuye a reducir el aspecto emocional de la inversión, y crea una recurrencia en el ahorro positiva en el largo plazo.
Veamos la estrategia con un ejemplo práctico:
Para el ejemplo, simulamos dos escenarios donde se invierte en un índice global de renta variable:
· Escenario 1: El inversor empieza a invertir el 1 de enero de 2022, con aportaciones mensuales de 1.000€, manteniendo la inversión dos años.
· Escenario 2: El inversor empieza a invertir el 1 de enero de 2023, con las mismas aportaciones mensuales de 1.000€, y manteniendo la inversión dos años.
Ambos escenarios se comparan con haber invertido todo el capital al inicio.
El periodo del escenario 1 coincide con un mercado bajista en los primeros meses, que culmina con una tendencia alcista en los últimos. Este escenario es ideal para la estrategia de aportaciones periódicas por las siguientes razones:
- Nos beneficiamos de realizar compras a precios más bajos durante las caídas de los primeros meses.
- Diversificamos nuestro punto de entrada al mercado y no invertimos todo antes de la primera bajada.
- Nos aprovechamos de la subida final, al haber ido acumulando aportaciones.
Representación escenario 1
Fuente: Ibercaja Gestión
En agregado, si comparamos la rentabilidad del periodo, frente a haber hecho una aportación única de 24.000€ el 1 de enero de 2022, el inversor obtendría una revalorización 1.535€ superior.
Pero veamos qué ocurre en un escenario totalmente distinto. En el escenario 2 el mercado sigue una tendencia claramente alcista, donde en ningún caso el precio vuelve a ser inferior al precio de entrada inicial. En este caso, las aportaciones periódicas obtienen una rentabilidad menor a la alternativa de realizar una única aportación al inicio del periodo. Los puntos positivos mencionados anteriormente se invierten y, ahora, pasan a jugar en nuestra contra.
Representación escenario 2
Fuente: Ibercaja Gestión
¿Qué conclusiones extraemos del estudio?
1. Las aportaciones periódicas nos permiten diversificar el punto de entrada, reducir el riesgo de mercado y los efectos de la volatilidad.
2. No requiere conocimientos de mercado avanzados y es accesible a todos los inversores.
3. Elimina la incertidumbre del inversor y la parálisis, lo que facilita ahorrar y empezar a componer capital.
4. A largo plazo, teniendo en cuenta la tendencia estructural alcista de los mercados, puede hacer que perdamos algo de rentabilidad.
El siguiente paso es empezar
Después del análisis queda clara una cosa, el mejor momento para empezar a invertir era ayer. La estrategia de inversión con aportaciones periódicas es accesible para todo el mundo y, para ponerla en práctica, recomendamos la inversión en fondos de gestión activa y globales. De la mano de expertos con conocimiento de mercado podremos quitarnos las dudas y empezar a ahorrar.