JP Morgan AM: “El futuro son los ETF”

Los fondos de inversión cotizados, también conocidos por sus siglas en inglés ETF (Exchange Traded Funds), se están convirtiendo en los productos financieros más demandados por los usuarios. Estos vehículos de inversión han captado 61.000 millones de dólares entre enero y abril de 2022.

El equipo de la gestora de activos J.P. Morgan Asset Management cree que la demanda de estos productos financieros seguirá creciendo en los próximos años. “Tengo claro que el futuro son los ETF”, ha asegurado Piera Elisa Grassi, gestora principal de carteras de estrategias globales e internacionales de REI (Research Enhanced Index) de J.P. Morgan AM, en un desayuno informativo celebrado en las oficinas de la firma en Madrid.

Los fondos cotizados no han parado de crecer desde su nacimiento, gracias a su flexibilidad y precio. Actualmente, representan más del 50% de la inversión total en Estados Unidos. “El mercado de los fondos cotizados ha crecido mucho en los últimos años. El año pasado fue el punto de inflexión, ya que entraron 200.000 millones de euros”, ha señalado Olivier Paquierm, responsable europeo de distribución de ETF de JP Morgan AM.

Sin embargo, la demanda de estos vehículos se está incrementando a mayor velocidad ahora en Europa. “La aceleración en Europa está siendo más rápida que en EEUU, que es donde está la industria más grande. Esto se debe a cómo se configuró el mercado en Europa, donde los fondos cotizados comenzaron a comercializarse con clientes institucionales y ahora llegan a clientes particulares”, ha explicado Paquierm.

A diferencia de la mayoría de ETF disponibles en el mercado, la gestora JP Morgan ha apostado decididamente por la gestión activa de estos productos como factor diferencial. Los fondos cotizados de gestión activa todavía representan una pequeña parte de los flujos hacia los ETF. En concreto, un 2% del dinero asignado a todos los fondos cotizados en lo que va de año.

JP Morgan AM dispone de un catálogo de 29 fondos cotizados, de los cuales 8 son de gestión activa. Estos productos se pueden contratar desde una participación. “Lanzamos nuestra gama de ETF en 2017. Y hemos ido ampliando el catálogo con productos centrados en la eurozona, Japón o China”, ha recordado Lorena Martínez-Olivares, responsable de ETF en la gestora. “Hace tres años empezamos esta aventura de innovar, que consistía en hacer lo mismo que ya estábamos haciendo, pero en los ETF. Ha sido un viaje para nosotros porque tienes que acostumbrarte a un nuevo vehículo”, ha contado Grassi.

Los fondos cotizados de gestión activa permiten acceder a una cartera diversificada con algunas ventajas respecto a los fondos de inversión tradicionales. Al igual que los fondos indexados, los ETF suelen cobrar comisiones más bajas que los fondos de inversión. Además, funcionan de una forma parecida a las acciones, ya que pueden comprarse y venderse en cualquier momento.

JP Morgan aplica algunas de las estrategias de inversión utilizadas en otros vehículos en los fondos cotizados. “JP Morgan es conocida por su plataforma de análisis. Cada analista tiene asignados entre 20 y 30 valores, con el objetivo de conocer bien esas empresas y ser capaces de anticipar qué va a ocurrir en el futuro”, ha afirmado Grassi.

Gracias a ese análisis, el equipo gestor no se limita a replicar la composición del índice de referencia, sino que realiza pequeñas variaciones en valores concretos (sobreponderando o infraponderando). "Teniendo en cuenta esta información, puedes hacer pequeñas variaciones que marcan la diferencia a final del ejercicio". 

Otra gran ventaja es la transparencia, ya que el inversor puede saber en todo momento cuál es la composición exacta de la cartera y la valoración (el precio). “No hay grandes diferencias en términos de porfolio respecto a los fondos de gestión activa, pero sí hay diferencias operacionales. Hay más transparencia, ya que el precio se calcula cada 40 segundos. El cliente está más informado en términos de cotización”, ha explicado Grassi. 

La mayor digitalización de la sociedad está detrás de esa demanda de mayor transparencia en los productos financieros, que ha potenciado los fondos cotizados. “La gente quiere acceder a su cartera desde el móvil y saber cuánto dinero tiene en este momento”, ha señalado Grassi.

Los flujos se están dirigiendo especialmente hacia fondos sostenibles, gracias a la mayor conciencia climática de las sociedad. “Cuando le preguntas a un inversor si quiere ser parte de la solución al problema del cambio climático, la respuesta es sí”, ha señalado Paquierm.