La Fed, dividida mientras un nuevo presidente acomodaticio ya empieza a perfilarse
Max Stainton - Estratega Senior de Macroeconomía Global en Fidelity International
La Reserva Federal de EEUU ha recortado los tipos de interés en 25 puntos básicos, tal y como se esperaba, situando el rango objetivo de los fondos federales en el 3,5%-3,75%. Sin embargo, el comunicado que ha acompañado la decisión -que ha eliminado la orientación futura sobre nuevos recortes-, junto con dos votos disidentes de tono más restrictivo, dio a este movimiento un matiz agresivo (o hawkish). Aun así, la reintroducción de la expansión cuantitativa (Quantitative Easing o QE), con compras de letras por valor de 40.000 millones de dólares al mes, junto con el gráfico de puntos que mantiene un recorte para el próximo año y otro para el siguiente, sugiere que una parte importante del FOMC sigue viendo margen para que los tipos bajen más antes de alcanzar un nivel neutral.
De cara al futuro, prevemos que la trayectoria de los tipos de interés en el mercado estará cada vez más determinada por las especulaciones en torno a la elección del nuevo presidente de la Fed por parte de Donald Trump, más que por los datos. En nuestro escenario base para 2026, anticipamos que la Administración Trump nombrará a un presidente de perfil acomodaticio o dovish y no tradicional, cuyo objetivo principal será reducir aún más los tipos. Esta dinámica probablemente hará que la curva de tipos a futuro se distorsione en torno a la fecha en que el nuevo presidente asuma el cargo, en mayo de 2026, con un nuevo ciclo de recortes incorporándose si este escenario se materializa. Aunque el mercado ya ha empezado a descontar esta posibilidad, aún hay margen para que se extienda tanto en el tramo corto como en el largo de la curva, siendo la llegada de un presidente dovish no convencional un riesgo poco valorado para el extremo largo.