La importancia de la inmigración en EE.UU.
En los primeros días de la nueva Administración Trump, ningún asunto ha sido más polémico que la inmigración. Las declaraciones del presidente sobre la construcción de un muro en la frontera meridional de Estados Unidos, sus medidas para prohibir los viajes desde países concretos y su concentración en la deportación de extranjeros ilegales han generado una respuesta negativa de sus detractores y una reacción positiva de algunos de sus partidarios.
Las políticas en este ámbito tienen repercusiones significativas para la economía y, en última instancia, para los mercados financieros.
El nivel de inmigrantes ilegales en los Estados Unidos ha caído en
los últimos años, debido a una ralentización de los flujos entrantes
brutos y también a unas acciones de deportación más agresivas. La
mayoría de la inmigración 
La gran mayoría de los inmigrantes ilegales llegan a Estados Unidos en busca de trabajo, la forma más efectiva de reducir la inmigración ilegal sería la imposición de fuertes sanciones, aplicadas de forma agresiva tanto a las personas físicas como a las empresas que contratan inmigrantes ilegales. Está claro que una deportación total de trabajadores ilegales provocaría una escasez de mano de obra que no afectaría a todos los sectores por igual.
Por otro lado la nueva política de inmigración podría reducir la inmigración legal, aunque cabe señalar que esto ni es ni mucho menos un dato seguro. Si la inmigración legal se ralentizase o desplomase, las consecuencias para la economía estadounidense serían muy graves.
Implicaciones para la inversión
Todavía no hay nada decidido por lo que respecta a la trayectoría futura de la inmigración en los Estados Unidos. Por lo general, los demócratas y los republicanos coinciden en que la inmigración legal (en lugar de la inmigración ilegal) es mejor, tanto para el inmigrante, como para la economía.
A lo largo de su historia, tanto la economía como la sociedad
estadounidense se han enriquecido gracias a la 
Si en los próximos años se invierte esta tendencia, se producirá una ralentización del potencial crecimiento económico estadounidense (que se compone del aumento de la productividad y del aumento de la mano de obra). Esto sería negativo para la renta variable estadounidense. Por otra parte, si esto ocurre en un momento en el que el estímulo fiscal está aumentando la demanda de una economía en situación de pleno empleo, podría provocar una subida de los salarios, de la inflación, de los tipos de interés y una potencial contracción de los márgenes corporativos, lo que perjudicaría tanto a la renta variable como a la renta fija.
Para los inversores estadounidenses, esto podría dotar de un mayor atractivo a los mercados extranjeros que a los domésticos. En definitiva, la trayectoria del capital invertido en los próximos años vendrá dada en parte por el ritmo al que los trabajadores de todo el mundo lleguen a nuestras orillas.
Nota de mercado - Market Insights
