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Rentabilidad y riesgo: dos factores clave a la hora de invertir
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Rentabilidad y riesgo: dos factores clave a la hora de invertir

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Queremos ayudarte a conocer mejor cómo eres como inversor y los factores que te influyen a la hora de tomar decisiones financieras. Con este objetivo hemos creado investIQ, una herramienta que te permitirá conocer qué perfil de inversor tienes así como ampliar tus conocimientos financieros.

Por ejemplo, ¿sabías que, a través de un fondo de inversión puedes obtener rentas periódicamente (y no solo cuando retiras las inversión)? Es lo que se conoce como fondos de reparto y consiste en disponer, mientras tengas la inversión en cartera, de unos ingresos determinados a través del pago de intereses o de dividendos. Esta es una alternativa de inversión muy atractiva para aquellas personas que inviertan con el objetivo de complementar sus ingresos mensuales. Si, por el contrario, inviertes como una medida para revalorizar tu dinero a largo plazo y estás dispuesto a asumir más riesgo, probablemente te compense perder periodicidad para ganar rentabilidad.

Al final, la mejor decisión de inversión siempre dependerá del objetivo que queremos conseguir y al riesgo que estamos dispuestos a asumir.

Por esta razón, conocer cuál es nuestra tolerancia al riesgo es fundamental. Normalmente, el grado de riesgo que un inversor está dispuesto a asumir depende de su propio carácter (algunas personas son más cautas por naturaleza), aunque también influyen otros factores como sus circunstancias económicas, la edad a la que invierte y el conocimiento que tiene del mercado en el que decide invertir. 

El riesgo suele tener una connotación negativa, sin embargo, a veces es sensato asumir más riesgo para alcanzar nuestros objetivos financieros. 

¿Hasta dónde arriesgar? Depende. Si eres capaz de cumplir con tus responsabilidades financieras de manera holgada y tienes suficiente dinero ahorrado, probablemente tengas una mayor tolerancia al riesgo. Otro factor clave, cuando hablamos de riesgo, es la edad. En términos generales, por ejemplo, si aún te queda mucho tiempo para jubilarte es probable que puedas asumir más riesgo que si estás a punto de retirarte ya que tendrás más tiempo para recuperar las pérdidas de una inversión (en caso de que las hubiera).

Determinar nuestra tolerancia al riesgo no es una tarea fácil. Por esta razón, para ayudarte a definir tu perfil de riesgo puedes acudir a un asesor financiero. Además, también puedes hacer este test que te ayudará a averiguar cómo eres como inversor.

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