Menos mal que los chinos han fallado
Como corresponde a un blog, aquí no sólo os vamos a ir comentando temas
relacionados con la comunidad de inversores reales y con el desarrollo
de Unience, sino que también queremos compartir con vosotros nuestras
historias de cada día. Y hoy nos ha ocurrido una que vale la pena
compartir. Os pongo en situación: 12:15 del mediodía; España jugando en
las Olimpiadas contra China; nosotros trabajando (como todos los que no
estáis de vacaciones, imagino) en silencio en la oficina, con visitas
esporádicas a www.elmundo.es
y www.marca.com
para ver cómo va la cosa. Todos lo hacemos (lo de visitar las webs),
menos Pablo, que se decide a comprar el partido en Zattoo
para verlo online. En cuanto nos enteramos, le vamos preguntando cada
poco cómo van. Sabíamos que unos 15 abajo al final del último cuarto,
pero de repente nos dice que están a tres a falta de un minuto y poco
más. Nos vamos los otros seis que estamos en Unience a su ordenador a
toda prisa, justo cuando Navarro se eleva para conseguir un triple
mágico. Empate a 70. Nos lamentamos a continuación cuando un chino mete
una de dos y saltamos cuando Marc empata a 72. Quedan unos 16 segundos.
China pide tiempo muerto y cuando va a sacar para jugar esa decisiva
bola final, ese balón que podía alejarnos o acercarnos a la gloria
olímpica, ese envite del caprichoso destino... ¡Se nos cae la conexión
de red! Cuando la hemos recuperado, Gasol ya se había hecho más grande
que Yao Ming! Bueno, es todavía una herencia del cambio de oficina (otro
día os la enseñamos, para que estéis como en casa) que acabamos de
completar, que como sabéis siempre acarrea algún desajuste temporal.
Esperemos que cuando juguemos la final contra LeBron, Kobe y cía no
tengamos ya estos problemas.