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Perspectivas de inversión del cacao y por qué incluir materias primas en tu cartera
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Perspectivas de inversión del cacao y por qué incluir materias primas en tu cartera

La inversión en materias primas no es una cobertura contra las caídas de los mercados bursátiles, pero puede aportar diversificación a las carteras y, con una perspectiva de largo plazo, proteger a los inversores en escenarios de inestabilidad geopolítica y aumento de la inflación. En este artículo compartimos las perspectivas sobre el cacao, una materia prima que están protagonizando titulares en muchos medios en los últimos días. También explicamos qué puede aportar una asignación a materias primas en las carteras de los inversores.

Cacao: la tormenta perfecta

Estos últimos días, coincidiendo con la tradición de las monas de Pascua, se ha hablado mucho de lo caro que salía a los negocios preparar el dulce este año. El motivo está en los precios disparados del cacao, la materia prima del chocolate, que cotiza también en máximos históricos.

La prolongada infrainversión en la reposición de árboles de cacao en las principales regiones productoras, Costa de Marfil y Ghana, ha provocado el envejecimiento de los árboles, que son más vulnerables a las condiciones adversas. El virus del brote hinchado del cacao ha afectado a unas 500.000 hectáreas de superficie plantada en Ghana, aproximadamente un tercio de todas las plantaciones. Esto, sumado a la sequía más fuerte desde 2016 (inducida por El Niño), ha devastado el cultivo, reduciendo los rendimientos y provocando el mayor déficit visto en 40 años.

Dado el largo ciclo de sustitución (los árboles suelen tardar entre 3 y 5 años en producir una cosecha), es improbable que surja pronto una solución por el lado de la oferta y es probable que los precios se mantengan elevados. La demanda ha sorprendido al mantenerse estable a pesar de los elevados precios de los insumos, ya que los confiteros han optado en general por limitar las subidas de precios repercutidas a los consumidores, centrándose en cambio en ganar cuota de mercado.

¿Por qué tiene sentido incorporar las materias primas en las carteras?

Las materias primas, como clase de activo, han experimentado una fuerte corrección tras los máximos alcanzados en el verano de 2022, cuando los inversores optaron por ser más cautelosos ante las perspectivas de la demanda mundial y las implicaciones de la subida de los tipos de interés. Sin embargo, existen factores subyacentes que hacen que resulte ventajoso invertir en materias primas a largo plazo. Los inversores deberían estudiar su buen comportamiento en un momento en el que muchas otras clases de activos han sufrido una rentabilidad poco favorable. La inversión en materias primas  pueden aportar diversificación a las carteras y, con una perspectiva de largo plazo, proteger a los inversores en escenarios de inestabilidad geopolítica y aumento de la inflación.

Cuando observamos el prolongado historial de los precios de las materias primas, vemos que el factor que determina en última instancia su dirección es la oferta. Entre 2001 y 2011, tuvimos un mercado alcista en el que los precios subieron bruscamente porque no había suficiente inversión en la oferta y los precios eran simplemente demasiado baratos. Los escasos volúmenes de existencias, agravados por la fuerte demanda de los mercados emergentes, provocaron una competencia por los recursos que duró casi una década. Al subir los precios, se produjo finalmente un aumento de la inversión (que aportó más eficiencia a la producción, mejores técnicas de almacenamiento, más innovación...) que acabó traduciéndose en un aumento de la oferta. Este aumento de la oferta provocó una corrección a largo plazo y un reequilibrio del mercado. Esto ocurrió en un momento en el que el crecimiento de China empezó a ralentizarse.

Incluso antes de que comenzara la guerra de Ucrania, había pruebas claras de una falta de inversión en suministros futuros que probablemente llevaría a que los precios volvieran a subir. Y esto es precisamente lo que ocurrió en 2022.

Hasta hace bien poco, la seguridad del abastecimiento era una consideración menor. El impacto desinflacionista de la entrega justo a tiempo, es decir, encontrar el lugar más barato en cualquier parte del mundo para producir tus bienes, era clave para la globalización. Está claro que el mundo ha cambiado. En la actualidad, la seguridad del suministro es, probablemente, junto con el coste, el principal factor que impulsa a las empresas a pensar en sus ciclos de producción. Dos tipos de vulnerabilidades parecen haber quedado al descubierto. Una es la falta de diversificación en el suministro y la segunda es la exposición a la globalización, donde se producen esos puntos de tensión porque las relaciones con los proveedores se han debilitado. ¿En qué mundo viviremos en los próximos años y con qué tipo de prioridades y tensiones estratégicas? Si las prioridades siguen girando en torno a la mitigación del cambio climático y las tensiones geopolíticas son elevadas y crecientes, el interés por las materias primas no hará más que aumentar.


Información importante: Los puntos de vista y opiniones aquí contenidos son los de Matthew Michael, director de inversiones de Schroders Y no necesariamente representan puntos de vista expresados o reflejados en otras comunicaciones, estrategias o fondos de Schroders. Este material tiene la intención de ser sólo para fines informativos y no tiene la intención de ser material promocional en ningún sentido. Este material no pretende ser una oferta o solicitud de compra o venta de ningún instrumento financiero. El material no tiene la intención de proporcionar y no se debe confiar en él para la contabilidad, asesoramiento jurídico o fiscal, o recomendaciones de inversión. No se debe confiar en las opiniones y la información de este documento cuando se toman decisiones individuales de inversión y/o estratégicas. Las rentabilidades pasadas no son una guía para las rentabilidades futuras y es posible que no se repitan. El valor de las inversiones y los ingresos de las mismas pueden disminuir o aumentar, y los inversores pueden no recuperar las cantidades invertidas originalmente. Todas las inversiones implican riesgos, incluido el riesgo de una posible pérdida de capital. Se cree que la información aquí contenida es fiable, pero Schroders no garantiza su integridad o exactitud. No se debe confiar en las opiniones y la información de este documento cuando se toman decisiones individuales de inversión y/o estratégicas. Los dictámenes de este documento incluyen algunos pronósticos. Creemos que estamos basando nuestras expectativas y creencias en suposiciones razonables dentro de los límites de lo que sabemos actualmente. Sin embargo, no hay garantía de que se vayan a realizar previsiones u opiniones. Estos puntos de vista y opiniones pueden cambiar.

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