Liberation Day
El pasado 2 de abril, llegó el tan esperado “día de la liberación”, en el cual Donald Trump, presidente de Estados Unidos, anunció los aranceles que aplicará a las importaciones del resto de países, y que tendrá repercusión en los mercados financieros.
Para todos los países, el aumento mínimo es del +10%, pero por ejemplo los productos importados de la Unión Europea soportarán aranceles del 20% y de China del 45%. Asimismo, cabe señalar que también se ha confirmado la introducción inmediata de un aumento arancelario del 25% sobre las importaciones de automóviles (vehículos y piezas de recambio) y del 200% sobre el vino procedente de la UE.
México y Canadá no se ven afectados por estos aranceles (por el momento), y se han prorrogado las exenciones para los productos incluidos en el acuerdo de libre comercio USMCA.
Estos aranceles entrarán en vigor el 9 de abril (el mínimo del +10% entrará en vigor el 5 de abril).
De este modo, el arancel medio sobre las importaciones a EE.UU. se situaría en el 22%, un nivel que no se veía desde principios del siglo XX.
¿Cuál será el impacto en los mercados?
La reacción de los mercados de renta variable a estos anuncios será lógicamente negativa en el corto plazo. A media sesión de hoy, el Ibex 35 se dejaba un 1% aproximadamente, el Eurostoxx el 2,50% y el Dax alemán un 2%. Los futuros de EEUU anticipan caídas cercanas al 3%.
Al mismo tiempo, el dólar se ha debilitado fuertemente frente al euro y al yen, y los tipos de interés han bajado fuertemente, descontando que el efecto de estos aranceles se verá más sobre el crecimiento de los países que sobre la propia inflación de los mismos.
¿Y ahora qué?
Creemos que hay margen para negociar, pero lógicamente cuanto antes se produzcan las negociaciones, menor será el daño sobre los mercados financieros. Además, es de esperar que el resto de países contesten con aranceles recíprocos sobre los productos exportados por Estados Unidos, lo que nos abocaría a una espiral de crecimiento de precios que no sería bueno para ningún país.
¿Qué podemos hacer en momentos como los actuales?
A corto plazo, está claro que vamos a ver volatilidad, con descensos en las bolsas mundiales, pero no podemos descartar fuertes rebotes de la renta variable, por lo que creemos que lo ideal para los inversores que ya están dentro del mercado, es permanecer en él. Para el inversor a largo plazo, está demostrado que se obtienen peores retornos intentando anticipar los movimientos de dicho mercado (market timing).
Un ejemplo de esto nos lo ilustra JP Morgan, si hubiéramos invertido 100.000 euros en acciones el 1/01/2004 y los hubiéramos mantenido invertido hasta el 31/12/2018, habríamos ganado 216.210 euros (ojo una rentabilidad superior al 216%, teniendo en cuenta la gran caída soportada en 2008), pero si nos hubiéramos perdido los 10 mejores días, la rentabilidad sería de 107.480 euros (la mitad de rentabilidad), si nos hubiéramos perdido los 30 mejores días, la rentabilidad sería de 74.320 (un tercio de rentabilidad) y perdiendo los 50 mejores días, la rentabilidad seria de 30.090 euros (un séptimo de rentabilidad). Queda claro la importancia de mantenerse invertido.
Para los inversores que estén fuera del mercado, surgirán oportunidades de compra en renta variable y además un activo como la renta fija sigue dando rentabilidades bastante atractivas.
En resumen, creemos que los aranceles introducidos por EEUU en el corto plazo generarán bastante volatilidad, un menor crecimiento e incluso un riesgo de recesión en EEUU, nadie gana con una guerra comercial. La UE ya ha anunciado que el viernes día 4 de abril, se sentará a ne