Renta 4 Cartera Selección Dividendo FI +2,3% a cierre de septiembre vs -8,1% del Euro Stoxx 50
Renta 4 Cartera Selección Dividendo FI se ha
revalorizado un +4% en el tercer trimestre de 2016, dejando la
rentabilidad anual en +2,3%. La rentabilidad que lleva el fondo en lo
que llevamos de año contrasta con la pobre rentabilidad de los índices
europeos que se dejan un -8% en lo que llevamos de año, es decir, el
fondo obtiene un +10,4% mayor rentabilidad que su índice de referencia
en 2016. El motivo como bien saben los partícipes que sigan las cartas
mensuales del fondo, es la elevada diferenciación de la cartera del
fondo con respecto a la composición del índice de referencia, dando
mucha más importancia a aquellas compañías que paguen un dividendo
atractivo y sostenible en el tiempo. Dentro de las empresas que mejor
comportamiento han tenido en el trimestre, destacan: Philips, Siemens,
Deutsche Post-DHL, BNP, Santander, Astrazeneca y Continental.
Este trimestre se han cobrado importantes dividendos de las
siguientes empresas: Ahold-Delhaize, Shell, Total, BBVA, Santander,
Rio Tinto, Unilever, Reckitt Benckiser y Astrazeneca.
En los últimos 3 años, la rentabilidad de Renta 4 Cartera
Selección Dividendo FI es del +18,4% o un +5,8% anualizado, frente al
+2,84% del Euro Stoxx 50, +11,61% del Euro Stoxx Net Return, o +0,9% y
+3,7% anualizado respectivamente. La rentabilidad del fondo Renta 4
Cartera Selección Dividendo FI, supone batir a su benchmark en un
15,5% y 6,75% a 3 años respectivamente.
Los cambios más importantes del mes han sido la inclusión de
Roche, Vinci, Allianz, Abertis, Bureau Veritas, IAG, Iberdrola y
LafargeHolcim en la cartera, todas ellas con rentabilidades por
dividendo por encima del 3% y algunas, como Iberdrola, Abertis y
Allianz cuyos accionistas disfrutan de una rentabilidad por dividendo
por encima del 5% que en los tiempos de tipos de interés negativos, se
antojan extremadamente atractivos.
Como ya comenté el mes pasado, seguimos siendo constructivos
con la renta variable europea. Las valoraciones no son exigentes a 14x
PER'16, dividendo del 4% y Precio/Valor Contable en 1,4x, todos estos
ratios dejan margen de mejora (entorno a un +10%-15% adicional desde
los niveles actuales) por re-rating a sus medias de los últimos 20
años, considerando además, que los beneficios están muy lejos de los
potenciales y de los logrados hace tan solo 6 años. Es más, en el
análisis de los ratios de los índices, habría que profundizar en las
valoraciones de los diferentes sectores, ya que hay sectores muy
baratos (automóviles, bancos, aseguradoras, etc) y otros muy caros
(consumo estable, real estate, tecnología o media), por lo que es
previsible cierta rotación desde sectores más caros hacia sectores
donde es más fácil encontrar valoraciones bajas.
En los últimos meses estamos viendo como empresas europeas
(Vinci, Saint Gobain, Nestle, Novartis, Unilever, Vodafone, Ahold,
Total y un largo etcétera), están emitiendo bonos que pagan muy cerca
del 0% de cupón. Las implicaciones para las empresas y los accionistas
para los próximos años que se financien a tan bajos tipos de interés
no puede ser más que positivo. Que una empresa logre reducir su coste
financiero y de endeudamiento hasta tal punto que se puede financiar
casi gratis, solo puede ir en beneficio del accionista siempre y
cuando, la empresa no invierta el capital en inversiones ruinosas.
El incremento de movimientos corporativos tiene toda la lógica
empresarial. Comprar una empresa o negocio, financiando la adquisición
con deuda a tipos de interés tan bajos como los que vivimos hoy en
día, debe generar valor para los accionistas al precio correcto.
Es de esperar que en los próximos años veamos un incremento
relevante del free cash flow o generación de caja libre de las
empresas europeas, incrementos del retorno del capital invertido,
mejora de los márgenes netos y por tanto del beneficio neto de las
compañías o un incremento de los dividendos pagados por las empresas a
sus accionistas, que deberían jugar muy a favor de los inversores
pacientes de renta variable.
Las últimas semanas, las noticias financieras están centradas
en Deutsche Bank, la salud económica de EEUU y los emergentes, las
posibilidades de subidas de tipos de interés en EEUU en diciembre, las
elecciones en EEUU y el momento en que el Reino Unido aplicará el
artículo 50 de la Constitución Europea para salir de la Unión Europea.
Ninguna de las incertidumbres se esclarecerá este mes, por lo que es
de esperar que el mercado consolide en un rango lateral las subidas
desde junio, para posteriormente cotizar la mejora macro y micro
económica que se espera para el último trimestre del año.
Todos los inversores estamos de acuerdo que los bancos
centrales han sido los auténticos causantes del fuerte rebote de los
mercados tanto de renta fija como de renta variable en los últimos
años. La realidad es que no tendríamos la represión financiera actual
con tipos de interés tan cerca del 0% en la mayoría de los activos
conservadores si no hubiésemos tenido a los bancos centrales bajando
tipos hasta el 0% e incrementando las políticas monetarias incluso
más, expandiendo sus balances para inyectar más liquidez al sistema.
Si los bancos centrales no estuviesen, no sabremos nunca que
hubiese pasado. ¿Bancos quebrados, empresas sin liquidez, estados sin
acceso a la financiación de sus déficits, recortes de costes, recortes
del gasto público, deflación.....? Nunca lo sabremos, pero la economía
siempre busca el equilibrio cuando no hay intervención, el libre
mercado es así. Con la intervención de los bancos centrales, ese
equilibrio no se acaba de encontrar y por eso suceden las barbaridades
económicas a las que estamos asistiendo todos los días con empresas y
Estados que se les paga por emitir deuda. Un absurdo, una burbuja, que
tarde o temprano explotará y se normalizará.
Pero, una vez llegados a este punto, ¿a qué posibilidades nos
enfrentamos en los próximos años en términos de rentabilidad? El
objetivo último de los bancos centrales con la política monetaria que
están proponiendo es la de generar inflación y crecimiento, mientras
se gana tiempo para que los Estados sean capaces de equilibrar sus
presupuestos. A día de hoy, a excepción de EEUU que sí que ha
conseguido que se cree empleo, se genere crecimiento y evitar la
deflación, el resto de regiones desarrolladas apenas han conseguido
salir de esa espiral deflacionista y de-crecimiento.
La bolsa estadounidense se encuentran no solo en precios, sino
también en términos de valoración, cerca de los máximos de los últimos
15 años, lo cual no invita a ser muy optimista con el retorno esperado
por la renta variable de esta región para los próximos años. Sin
embargo, existen caminos que nos llevarían a apreciaciones de las
bolsas incluso con este escenario de valoraciones tan exigente.
Por ejemplo, si se retoma el crecimiento económico global, con
baja inflación y ausencia, por tanto, de subidas pronunciadas de los
tipos de interés. Lo que los anglosajones llaman: Goldilocks. Si
estamos en este escenario, veremos niveles superiores en no muy largo
espacio de tiempo.
Otro escenario posible, y mucho más negativo para los mercados
tanto de renta fija como de renta variable, sería que empecemos a ver
repuntes notables de la inflación por encima del 3%-4% por la
transmisión de la enorme masa monetaria existente hoy en día a la
economía real, que provoque una subida rápida de los tipos de interés
para contener el repunte inflacionista que vuelvan a dejar a la
economía endeble y expuesto a otra recesión quizás de mayor calado que
las sufridas en las últimas décadas. Tampoco creo que sea probable
este escenario, pero desde luego la probabilidad es superior al
10%-15% que no es baladí.
Pero quizás, el escenario más probable es que en los próximos
años estemos con crecimientos moderados, pero crecimientos al fin y al
cabo, con inflación moderada que procuren unos tipos relativamente
bajos en términos históricos, y que en el caso de repuntes de
inflación, los tipos más elevados a los que vendrían unida esa
inflación, evitará que los mercados (tanto de renta fija como de renta
variable) se aprecien mucho más allá de donde estamos.
La clave, por tanto, en mi trabajo (gestionar fondos de renta
variable europea) y en mi opinión, volverá a estar en encontrar
aquellos sectores y empresas que sean capaces de incrementar el
beneficio y generar caja para sus accionistas incluso en estos
escenarios macroeconómicos tan poco atractivos. Años atrás, ganar
dinero con la renta variable era más fácil (se ganaba dinero
invirtiendo hasta en los bancos y las eléctricas...). Hoy hay que
analizar y estudiar mucho más porque la situación macro a nivel global
es muchísimo más compleja que hace años.
Ver Informe de seguimiento (Documento en Pdf)
D.Javier Galán Parrado
Tel: 91 398 48 05 Email: online@renta4.es