Small Caps: pequeñas grandes ganadoras

Small Caps: pequeñas grandes ganadoras

Desde que se desató la crisis de la COVID-19, han sido numerosos los profesionales que han señalado a las Small Caps o empresas de pequeña capitalización como las grandes triunfadoras de esta situación tan compleja e incierta que estamos viviendo. Para confirmarlo basta con comparar la evolución del IBEX 35 con el comportamiento del IBEX Small Caps: mientras que el selectivo de las compañías con mayor capitalización de nuestro país ha caído un 24,79% desde comienzos de año, el IBEX Small Caps sólo ha perdido un 3,5%. Las conclusiones son las mismas al comparar el MSCI Europe con el MSCI Europe Small y el S&P500 con el Rusell 2000. Sin embargo, normalmente ocurre lo contrario, en las crisis más complicadas, las pequeñas empresas son las peor paradas. Entonces, ¿por qué en esta ocasión han soportado mejor las tormentas más intensas del mercado? Los expertos indican que, detrás del buen comportamiento de las Small Caps durante la crisis sanitaria, se encuentran sobre todo factores sectoriales. En los índices que aglutinan a las pequeñas empresas, el peso de las compañías del sector farmacéutico y tecnológico es mayor que en los selectivos formados por las empresas de mayor capitalización. Por el contrario, los grandes índices están compuestos por compañías de los sectores más perjudicados como el bancario y el de transporte aéreo.

¿Continuarán resistiendo las pequeñas compañías? ¿Es un buen momento para invertir en ellas? ¿Cómo y en cuáles debemos invertir? Son cuestiones de gran complejidad a las que no podremos dar respuesta sin entender, al menos, qué son las Small Caps, cuáles son las ventajas e inconvenientes de invertir en este tipo de compañías, qué debemos tener en cuenta para seleccionar las mejores y qué fondos de inversión en Small Caps recomiendan los expertos.

¿Qué son las Small Caps?

Las Small Caps (término abreviado de Small Capitals) son compañías pequeñas o medianas que cotizan en los mercados financieros y que se caracterizan por su baja capitalización bursátil. La capitalización de una empresa se calcula multiplicando el número de acciones en circulación por su precio actual. Normalmente, cuando el importe resultante se encuentra entre 300 millones y 2.000 millones de dólares, la compañía se considera una Small Cap.

Ventajas, ¿por qué deberíamos invertir en ellas?

Las principales ventajas de invertir en pequeñas compañías son cuatro:

Potencial de crecimiento

Una de las razones para invertir en Small Caps es su capacidad para crecer de forma significativa en un periodo de tiempo reducido. Debido a su tamaño, estas compañías logran incrementar sus ingresos y beneficios de forma más rápida que otras que ya han alcanzado un tamaño considerable y cuyos beneficios se han estabilizado.

No se encuentran en el punto de mira de la mayoría de analistas

Existen mayores probabilidades de encontrar una empresa infravalorada en el segmento de las Small Caps que entre las compañías consideradas Large Caps porque las primeras son compañías menos estudiadas por la mayor parte de los analistas. Así, mientras que en el mercado de Large Caps una acción es seguida por un promedio de 22 analistas, en el mercado de Small Caps el promedio se sitúa en seis acciones por analista.

Menor impacto de conflictos geopolíticos

Como consecuencia de su tamaño, numerosas Small Caps desarrollan su actividad a nivel local reduciendo su exposición a conflictos geopolíticos y a factores como las fluctuaciones de los tipos de cambio. Además, debido también a sus dimensiones, su capacidad para adaptarse ágilmente a nuevos escenarios o dificultades es superior a la que poseen grandes compañías como Telefónica o Repsol.

Diversificación

Las compañías de baja capitalización son una opción muy atractiva para diversificar una cartera de renta variable. La combinación de Large Caps y Small Caps dentro de la misma cartera permite contar con fuentes de rentabilidad distintas reduciendo el riesgo soportado.

Inconvenientes, ¿por qué no deberíamos apostar por las pequeñas compañías?

El riesgo, la falta de transparencia y la iliquidez son los inconvenientes más significativos que podríamos encontrarnos al invertir en Small Caps.

Riesgo

La cartera de clientes, las ventas y los beneficios de las Small Caps suelen ser reducidos y sus perspectivas de futuro, inciertas. Por este motivo y en términos generales, para aprovechar el potencial de crecimiento de estas empresas, es necesario soportar un riesgo elevado.

Falta de transparencia e información

Es mucho más difícil encontrar información sobre compañías de baja capitalización que sobre empresas de la talla de Inditex, por ello, la labor de investigación y análisis al invertir en Small Caps debe ser mayor. Se explica así también el elevado riesgo soportado y las mayores oportunidades de descubrir empresas infravaloradas.

Iliquidez

El número de compraventas de acciones de compañías de baja capitalización es inferior al de acciones Large Caps, son acciones menos líquidas, por tanto, el riesgo de no encontrar un comprador o vendedor en el momento deseado es mayor que el que se asume al invertir en compañías de elevada capitalización.

¿En qué debemos fijarnos para invertir en Small Caps?

Balances, estrategias, modelos de negocio y ventajas competitivas son algunos de los factores a tener en cuenta para seleccionar las Small Caps en las que invertir nuestros ahorros. Deberíamos escoger empresas con:

  • Balances solventes
  • Ventajas competitivas
  • Credenciales ESG
  • Gestionadas por sus fundadores

Por el contrario, debemos evitar compañías:

  • Cíclicas
  • Con modelos de negocio especulativos
  • Con mayor popularidad en un momento determinado
  • Conocidas como binarias, aquellas que podrían obtener resultados extraordinarios o, en caso contrario, quebrar

Según explica Lola Solana, gestora de fondos de RV Small Caps de Santander AM, es fundamental comprobar que la compañía cuenta con "un balance saneado, que su valoración es atractiva y, por encima de todo, que está liderada por un equipo directivo con credibilidad".

Cuatro mitos que rodean a las Small Caps

En ocasiones, son los mitos que acompañan a las empresas de pequeña capitalización los que frenan al inversor impidiendo que aproveche fantásticas oportunidades, de ahí la importancia de analizar y contrastar dichos mitos o ideas preconcebidas.

Mayores niveles de riesgo son inherentes a las Small Caps

Es cierto que, por norma general, invertir en compañías de baja capitalización es más arriesgado que hacerlo en Large Caps debido, entre otras razones, a su cartera de clientes reducida y a su menor fortaleza financiera. Sin embargo, el riesgo no reside en el tamaño de la compañía, prueba de ello es la quiebra de empresas del tamaño de Enron y Blockbuster. El riesgo se encuentra en aquellos factores que podrían impedir que la organización mantenga su ventaja competitiva, por ello, la baja capitalización de una compañía no debería considerarse en todo caso un factor de riesgo.

Lola Solana afirma que "existe la idea errónea de que las Small Caps son más volátiles y arriesgadas que las grandes, pero no lo son, y esto se ha comprobado en periodos de crisis siempre que estén elegidas con pericia, ya que están menos endeudadas que las grandes. No son más volátiles y, si miras a largo plazo, si inviertes en una pequeña empresa siempre lo va a hacer mejor que una grande, porque su potencial es mucho mayor. Son empresas de crecimiento a las que tú les das la mano y haces el recorrido con ella".

Cuanto más pequeña, más débil

En el universo Small Caps existen compañías con balances muy saneados, reducidos niveles de deuda y sólidas ventajas competitivas que, además, al actuar localmente, no se ven afectadas por cambios globales y conflictos geopolíticos que sí impactan en los resultados de sus rivales multinacionales. Afirma Lauren Romeo, gestora del fondo Royce Smaller Companies de Legg Mason Global Asset Management, que “durante más de una década, los niveles de deuda de las Small Caps han sido consistentemente más bajos que los mostrados por las compañías de mayor tamaño”.

Las Small Caps no retribuyen a sus accionistas

La capitalización de la compañía no determina la política de retribución de sus accionistas, ésta depende en mayor medida de la solidez del balance y de la cuenta de resultados de la empresa. Durante el pasado 2019, Atresmedia, compañía de baja capitalización, proporcionó rendimientos del 11,48% a sus accionistas mediante el reparto de dividendos, una cifra que supera de forma significativa el rendimiento medio de los dividendos repartidos por las grandes del Ibex 35, del 3,28%.

Las Small Caps son compañías de reciente creación

Aunque en bastantes casos la baja capitalización de las Small Caps se debe a que son empresas que se encuentran dando sus primeros pasos, en otros, la fecha de su nacimiento no guarda relación ninguna con su capitalización. Así, por ejemplo, la cadena de supermercados DIA es una Small Cap que abrió su primera tienda en 1979, hace más de 40 años; y la compañía Twitter, Inc. es una Large Cap que comenzó su andadura en 2006. La capitalización y la calificación de la compañía como Large o Small Cap dependen, por tanto, del número de acciones y del precio de las mismas en el mercado y no de la fecha de su fundación.

Cómo invertir en Small Caps mediante fondos de inversión

Una forma de invertir en pequeñas empresas es adquiriendo participaciones de un fondo de inversión en Small Caps. Entre los recomendados por los expertos destacan los siguientes:

CREDIT SUISSE (LUX) SMALL AND MID CAP ALPHA LONG/SHORT B EUR

El fondo de la gestora CREDIT SUISSE ASSET MGMT persigue alcanzar la máxima rentabilidad reduciendo al mínimo la correlación con el mercado de renta variable y soportando una volatilidad menor. El patrimonio bajo gestión es de 58 millones de euros y la rentabilidad anual a 10 años es del 5,30%. Los partícipes del fondo soportan una comisión de gestión del 2%, una comisión variable del 20% y una comisión por suscripción del 5%. Las posiciones más importantes del fondo son Delivery Hero SE (4,50%), MorphoSys AG (4,49%) y Airbus SE (4,30%).

COMGEST GROWTH MID-CAPS EUROPE

Se trata de un fondo de la gestora COMGEST AM INTERNATIONAL LTD que invierte en “empresas de mediana capitalización de crecimiento a largo plazo que tengan su sede o realicen sus actividades predominantes en Europa.” El patrimonio que gestiona es de 253 millones de euros y la rentabilidad anual a 5 años conseguida es del 13,97%. Las comisiones que deben abonarse al participar en el fondo son dos: comisión de gestión (1,5%) y comisión por suscripción (4%). Las compañías con mayor peso en el fondo son GN Store Nord A/S (6,11%), Temenos AG (5,38%) y SimCorp A/S (5,15%).

FIDELITY FUNDS-EUROPEAN DYNAMIC GROWTH FUND

El fondo gestionado por Fidelity International selecciona e invierte en compañías medianas, con una capital que se sitúa entre los 1.000 y 10.000 millones de euros y cuya sede se encuentra en Europa o desarrolla su actividad fundamentalmente en dicho continente. El patrimonio bajo gestión es de 964 millones de euros y la rentabilidad anual a 10 años que ha alcanzado el fondo es del 11,85%. La única comisión que soportan sus partícipes es la comisión de gestión, del 0,8%. Las posiciones principales del fondo son SAP SE (6,88%) y Novo Nordisk A/S B (4,96%).

Fernando Luque, Senior Financial Editor de Morningstar, destaca también tres fondos de renta variable Mid-Small Caps americanas que han recibido por parte de los analistas una calificación cualitativa positiva: Neuberger Berman US Small Cap, Schroder ISF US Small & Mid-Cap y Robeco US Select Opportunities.

Es muy difícil (casi imposible) saber si las pequeñas empresas seguirán ganando la partida a la COVID-19, pero de lo que no cabe ninguna duda es de que a largo plazo, aquellas pequeñas y medianas compañías con balances solventes, ventajas competitivas y credenciales ESG que son gestionadas por valiosos profesionales serán una apuesta segura para los inversores.

0 ComentariosSé el primero en comentar
User