Mutuactivos Semanal | Prudencia... sin pasarse
Por Ignacio Dolz de Espejo, director de Soluciones de Inversión de Mutuactivos
En la nota de la semana pasada explicábamos que la valoración de algunos subsectores de la bolsa de EE.UU. empieza a parecer excesiva y difícil de justificar incluso en escenarios muy optimistas.
Una buena amiga me contestaba que puede ser el momento de mirar un poco más lejos cosas a las que normalmente no puedes dedicar tiempo. Creo que en realidad me estaba recomendando tener cuidado con dar un mensaje alarmista.
Y es cierto, corremos el riesgo de estar dando un mensaje que no es nuestra intención: sólo estamos aconsejando recortar tácticamente el peso en bolsa americana, no descabalgarnos de los mercados. El peso estratégico de cada persona en bolsa debe ser siempre el resultado de una reflexión sesuda sobre metas y capacidad de asunción de riesgo: nuestra planificación financiera. Sobre ese peso estratégico podremos subir o bajar tácticamente nuestra exposición, pero sin grandes excesos, porque nadie tiene la bola de cristal y correremos el riesgo de equivocarnos.
En la nota reflexionaba sobre el “sesgo de manada” en los mercados financieros, comparándolo con el comportamiento de la inteligencia artificial al replicar patrones familiares, como dibujar relojes marcando las diez y diez. Destacábamos cómo este sesgo lleva a analistas e inversores a seguir tendencias mayoritarias sin un análisis individual, lo que puede resultar en valoraciones irracionales y burbujas, como ocurrió en 1999 y 2008.
Actualmente, aunque la economía estadounidense sigue fuerte gracias al capex de la IA y Europa busca crecer mediante estímulos fiscales, las valoraciones de algunos activos parecen exageradas para el momento del ciclo. Por ello, en Mutuactivos estamos bajando el riesgo de forma táctica y gradual, evitando la complacencia y gestionando el riesgo con intención de tener liquidez que poder aprovechar ante una corrección.
"El S&P 500 ha ofrecido una rentabilidad media anualizada del 10,9% en los últimos 30 años, la deuda corporativa investment grade ha generado un rendimiento medio del 3,5%."
Ojo, no recomendamos salir de bolsa, sino hacer un ajuste a la baja.
Invertir a largo plazo sigue siendo la mejor decisión, respaldada por datos históricos demuestran su superioridad frente a estrategias cortoplacistas:
- El S&P 500 ha ofrecido una rentabilidad media anualizada del 10,9% en los últimos 30 años, incluyendo periodos de crisis como la burbuja puntocom y la Gran Recesión. En comparación, la deuda corporativa investment grade han generado un rendimiento medio del 3,5% en el mismo periodo.
- La renta variable supera a la renta fija en el 80% de los periodos de 10 años y en el 99% de los periodos de 20 años, incluso ajustando por inflación.
- Invertir con aportaciones constantes y dejando que actúe el interés compuesto genera rentabilidades que parecen magia.
- La volatilidad es inevitable, pero su impacto disminuye con el tiempo. Durante la crisis de 2008, el S&P 500 cayó un -37%, pero se recuperó en menos de cinco años y alcanzó máximos históricos en la década siguiente.
Invertir a largo plazo no significa quedarse inmóvil. Significa evitar decisiones impulsivas y mantener la coherencia con los objetivos estratégicos.
En resumen, no hablamos de desinvertir ni de abandonar el mercado, sino de ajustar la exposición para proteger las carteras. ¿Por qué? Porque los riesgos se acumulan: desaceleración de la economía y valoraciones elevadas.
Lo estamos haciendo bajando el peso en bolsa, reduciendo EE.UU. a favor de Europa, bajando el peso en crédito y subiendo la duración.