Igualdad de género: una temática de inversión real
En 2015, las Naciones Unidas adoptaron 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible como guía para crear un futuro más sostenible para todos, y el quinto de esos objetivos es la igualdad de género. Conscientes de que la igualdad de género constituye un derecho humano fundamental y uno de los cimientos necesarios para la paz, la prosperidad y la sostenibilidad, un gran número de actores de la esfera pública y privada están adoptando medidas para reducir la brecha de género. Esta iniciativa ha cobrado un impulso considerable dado que, además de ser una causa social noble, reviste un claro interés económico. Garantizar que haya más presencia femenina en la población activa y en puestos directivos es, sencillamente, un buen negocio.
En consonancia con el objetivo de igualdad de género, Nordea Asset Management lanzó su estrategia mundial de diversidad de género (Global Gender Diversity strategy) a principios de este año. La solución invierte en empresas con una representación de género diversa, además de incorporar otros criterios ASG, como la exclusión de empresas que incumplen la legislación internacional y las normativas sobre la protección medioambiental, los derechos humanos y los estándares laborales.
Creemos que la diversidad de género impulsa la rentabilidad de las empresas, por lo que las que aboguen por esta práctica deberían verse beneficiadas. Si bien se trata de una cuestión social, también está correlacionada con el éxito empresarial. Por ejemplo, en los países desarrollados con una población envejecida, como Japón, los estudios demuestran que una mayor diversidad de género en la población activa impulsa el PIB. A nivel corporativo, el capital humano es un factor del que una empresa puede sacar verdadero partido, y resulta muy difícil de copiar por la competencia. Existe una gran demanda por los mejores talentos, por lo que, si una empresa logra generar igualdad de oportunidades para todos, tendrá una mayor reserva de talento entre la que elegir. Esto brinda a la empresa una ventaja frente a sus competidores, que no tendrán el mismo potencial de crecimiento. Además, la empresa estará mejor preparada para mantener y facilitar el desarrollo de sus mejores profesionales si adopta un enfoque objetivo en lo referente a la progresión de los empleados. Del mismo modo, cuando una empresa realiza contrataciones externas, el conjunto de candidatos con talento es sencillamente mayor si incluye a todos los candidatos disponibles. Hay varios estudios que demuestran que la diversidad de género es beneficiosa para los resultados empresariales. Esto se debe, entre otros factores, a la ampliación de la reserva de talento.
Con respecto a determinadas empresas, como L'Oréal, Mariott Group y Visa (en las que la estrategia Global Gender Diversity de Nordea está posicionada), una plantilla diversa más alineada con los rasgos demográficos de los clientes puede contribuir a que la firma conecte mejor con estos últimos. Naturalmente, esto impulsaría los resultados. Para las empresas y los inversores, tiene sentido desde el punto de vista económico beneficiarse de la reserva de talento más amplia, sobre todo cuando surgen dificultades demográficas.
Consideramos que una empresa muestra diversidad de género si las mujeres representan, como mínimo, un tercio de los puestos de alta dirección. Además, si una empresa muestra una tendencia positiva a la hora de aumentar y promover la diversidad, también puede ser incluida en nuestro universo de inversión. No tenemos en cuenta a las empresas «exclusivamente femeninas», puesto que valoramos la diversidad. También incorporamos criterios ASG a nuestro análisis fundamental. El objetivo es evitar empresas que probablemente se enfrenten a los obstáculos que trae consigo la rápida evolución de las tendencias normativas, medioambientales, demográficas o tecnológicas. Las empresas a las que nuestro modelo interno exclusivo atribuye una calificación C quedan excluidas.
En primer lugar, analizamos el universo de inversión aplicando nuestro filtro de liquidez y los parámetros de diversidad de género en Bloomberg. A continuación, realizamos evaluaciones tanto cuantitativas (valoración, crecimiento, calidad y beneficios, entre otras) como cualitativas. Nuestra cartera final está formada por unas 80 a 100 empresas. Ante todo, buscamos generar valor para nuestros clientes. Esta estrategia no solo les ofrece la posibilidad de percibir rentabilidades atractivas, sino que les permite influir realmente en la sociedad mediante la consecución de los objetivos de sostenibilidad en materia de diversidad de género. Las inversiones sostenibles desempeñarán un papel destacado en adelante. Las empresas dispuestas y capaces de asignar recursos adicionales para garantizar la diversidad sacarán partido de esas acciones en el futuro.
Julie Bech, cogestora de la estrategia Global Gender Diversity de Nordea