Idealismo, ambición y coraje: las claves para el resurgir de Adolfo Domínguez

Idealismo, ambición y coraje: las claves para el resurgir de Adolfo Domínguez

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Una política de austeridad con un toque de hiperinnovación. Así ha definido su estrategia de gestión la recién nombrada consejera delegada de la compañía textil Adolfo Domínguez, Adriana Domínguez

La capitanía le ha llegado en un momento que exige tomar retos: conseguir que su negocio sea rentable y llevar a cabo un plan de fusión de marcas para centrar todo su diseño, negocio y red de tiendas en la marca principal (Adolfo Domínguez). Lo últimos resultados correspondientes al ejercicio 2017/2018 mostraron que, pese a mejorar en ventas, sigue sin ser rentable: alcanzó los 113,7 millones de euros en ventas (un 3,1% más que el año anterior), redujo sus pérdidas por tres en un año (70%), sin embargo, sigue perdiendo en torno a 7 millones de euros. 

Además, también tiene que hacer frente al bache por el que pasa el sector textil, ya que la mayoría de sus competidores como Inditex o H&M están sufriendo en sus cuentas.

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“Este negocio está muy influenciado por el clima: el invierno ha tardado en llegar, al igual que el verano y dicho efecto a las compañías textiles nos pilla a destiempo. Lo positivo es que este revés nos lleva a salirnos de nuestros propios patrones y nos obliga a innovar, por ejemplo, ahora estamos muy centrados en los complementos”. afirma Domínguez. 

¿Y cómo se dirige una empresa familiar en este contexto? "Tengo dos cosas, soy nueva, pero también se puede confiar en mí porque la empresa es mi nombre, tiene un signo identitario y es importante para movilizar a un grupo de 1.300 trabajadores que puede tener sus dudas", ha señalado la consejera delegada de la compañía, inmersa en un Expediente de Regulación de Empleo que afecta a 110 trabajadores, mayoritariamente de tiendas.

El nuevo rumbo que ha tomado está muy enfocado en la expansión internacional, la digitalización y la sostenibilidad. “Tenemos un 48% del negocio fuera de España y cuando acabe el ejercicio estaremos en un 51%. Tenemos que ‘limpiar’ la red de España porque la crisis nos pilló muy expuestos a este mercado. Por ejemplo, el mes que viene abriremos en Australia pero nuestro objetivo principal es Latinoamérica”, indica. 

En cuanto a la digitalización, la tendencia e-commerce está empujando a las compañías retail tradicionales a adaptar su negocio a marcha forzada para poder hacer frente a sus competidores en la era Amazon y en Adolfo Domínguez son conscientes de ello. Por ello, la firma apuesta por la ‘omnicanalidad’, es decir, apuestan por lo digital pero también por sus canales de venta presencia. “Lo difícil no es producir, sino vender. El verdadero ‘arte’ es hacer mucho con lo que se tiene y nosotros combinamos esta política de austeridad con hiperinnovación”. 

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La sostenibilidad, por otro lado, es un factor clave, ya que, como la consejera delegada explica, cada día se fabrica más y más rapta y la mentalidad de los clientes está evolucionando hacia una concienciación más socialmente responsable. Por ello, han dejado de utilizar cuero o ante e implementar materiales sustitutivos que, además, son más accesibles para el consumidor. 

El reto de ser una empresa familiar cotizada

Con respecto a los vaivenes que ha sufrido la cotización durante los últimos años, la directiva resalta la necesidad de "tener muy claro el medio plazo y tener una visión de largo plazo". Desde que tocó mínimos en marzo, su cotización se revaloriza más de un 46%. No obstante, desde los máximos de 2006, pierde en bolsa casi un 90%.  No en vano, estas caídas han provocaron que algunos gestores como Iván Martín de Magallanes opine que la compañía se encuentra en un buen momento de entrada.

Y es que, según ha comentado Fernando Vázquez, Socio de Deloitte, hay estudios que afirman que la rentabilidad a largo plazo de las compañías familiares son superiores a las que no lo son. "Estar en bolsa es bueno porque nos exige muchos procedimientos y claridad, pero creo que lo bueno es la visibilidad. Las empresas familiares queremos permanecer en el tiempo porque cuando te juegas tu propio patrimonio, la cosa cambia. En estas firmas se lucha hasta el final”, incide Domínguez. 

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