Las acciones de Iberdrola se están desplomando hoy más de un 8%, hasta mínimos de nueve años. Cotizan en el momento en que escribo esto a 3,57 euros.
El desplome se produce por las necesidades vendedoras de un accionista, ACS, que a día de hoy sigue siendo el mayor accionista de la compañía, con un 14,8%.
En concreto, ACS ha tenido que vender un paquete del 3,6% de la compañía. ¿Para qué? La compañía dirigida por Florentino tiene 'pignoradas' sus acciones de Iberdrola. Esto es, las tiene puestas en los bancos que le han prestado dinero como aval para los préstamos.
Y, en ese aval, una de las condiciones puestas sobre las acciones es que si Iberdrola bajaba de determinados niveles se tiene que poner garantías adicionales. Uno de esos niveles eran los 4 euros.
¿Pero de dónde sacar esas garantías adicionales? Se ve que la cosa estaba muy difícil. Y entonces corría el riesgo de que los bancos se quedaran con su participación en Iberdrola.
¿Cómo lo ha resuelto? Según me cuentan, el pacto al que ha llegado Florentino con sus acreedores es que acepta que le suban el tipo de interés que paga, a cambio de que no le ejecuten la pignoración. Mejor reducir la participación que perder el control de las acciones.
La venta de las acciones de Iberdrola le ayuda en dos vías: a) obtiene liquidez para seguir pagando la deuda; b) al reducir el volumen reduce también las garantías que tiene que poner.
Pero esto lo ha hecho perdiendo una pasta. El precio medio de compra de las acciones era de 7,1 euros, mientras que el precio de venta ha sido de 3,62 euros, nada más y nada menos, casi un 50% de palme.
¿Y desde el punto de vista de la inversión que hacemos? Cuando las caídas se producen porque un accionista vende forzado, no suele ser mala cosa echarle un vistazo a la compañía. Es como si tu vecino tiene que vender la casa para que no se la quede el banco y te la ofrece a precio de saldo. Pues por lo menos te la mirarías si tienes posibilidad de comprarla.
Otra cosa es si la comprarías o no. Eso ya depende de tí. De si te gusta el negocio y si te parecen atractivas las valoraciones, pero no parece mala cosa darle una vuelta... El asunto es si ACS, que tiene una larga batalla con la dirección de Iberdrola, tira definitivamente la toalla y eso supone que seguirá vendiendo acciones... Esto podría presionar mucho más la acción.
Es decir, si tu vecino tiene muchos más pisos que está pensando vender en la misma finca... Pero con visión de muy largo plazo...
En fin ¿Cómo lo véis?
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