Ciberseguridad: un motor de crecimiento clave para la próxima década
Erik Swords, gestor del fondo Allianz Cyber Security
Vivimos en un mundo cada vez más conectado, donde la digitalización es la base de nuestras vidas. Desde casas inteligentes y vehículos con sistemas de asistencia, hasta el almacenamiento de datos en la nube y las aplicaciones para trabajar y comunicarnos, la tecnología es esencial en nuestro día a día. En este contexto, la ciberseguridad no solo protege la información y la continuidad operativa de empresas y gobiernos, sino que se ha convertido en un sector que impulsa la innovación y la transformación digital.
Factores que impulsan su expansión
- Creciente conectividad: más de 20.000 millones de dispositivos conectados a internet (desde electrodomésticos hasta sensores industriales) representan potenciales puntos de acceso para ciberdelincuentes, generando una demanda constante de soluciones de seguridad.
- Entorno geopolítico: conflictos y rivalidades globales se trasladan al ciberespacio, afectando infraestructuras críticas, propiedad intelectual y seguridad nacional, lo que refuerza la inversión gubernamental y corporativa en protección digital.
- Nuevas tecnologías: inteligencia artificial y automatización transforman tanto los ataques como las defensas, permitiendo respuestas más rápidas y eficaces.
- Marco regulatorio más estricto: la legislación en protección de datos y seguridad obliga a empresas de todos los sectores a reforzar sus sistemas, impulsando la demanda de servicios y productos especializados.
Un mercado con gran potencial de inversión
El conjunto de estas dinámicas está dando lugar a un mercado en constante crecimiento. Según estudios recientes, el gasto global en soluciones de ciberseguridad superará los 200.000 millones de dólares en el corto plazo y se espera que crezca a un ritmo anual cercano al 12,6% durante los próximos años, hasta 2030. Esta demanda creciente no solo implica una mayor inversión en productos tecnológicos, sino también la aparición de nuevas empresas especializadas, startups innovadoras y grandes compañías que amplían sus capacidades en esta área. Además, los avances en inteligencia artificial aplicada a la ciberseguridad están permitiendo desarrollar soluciones que detectan amenazas en tiempo real, gestionan riesgos y protegen infraestructuras cada vez más complejas.
Por tanto, este crecimiento sostenido convierte al sector en una oportunidad atractiva para inversores que buscan exposición a una industria con fuerte potencial de desarrollo y solidez ante ciclos económicos adversos.