¿De qué forma están afectando los criterios ESG al panorama de la inversión?
Los criterios ambientales, sociales y de buen gobierno (ESG) son parámetros no tradicionales que pueden afectar al rendimiento de una empresa.
Pero, ¿Por qué los inversores les prestan cada vez más atención?
Cambios en las políticas medioambientales y sociales
Gobiernos de todo el mundo se han comprometido a cumplir una serie de objetivos de emisión de dióxido de carbono. En 2016, 196 estados firmaron el Tratado de París dentro de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático con el objetivo de combatir el cambio climático y evitar que las temperaturas mundiales aumenten en más de 1,5 °C de aquí a 2030. El Gráfico 1 muestra que muchos gobiernos se encuentran muy lejos de alcanzar este objetivo. La barra gris muestra las emisiones totales estimadas sobre la base de la actual política por país/región, y la verde las emisiones objetivo en función de las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC, por sus siglas en inglés), que forman parte del Tratado de París. A modo de referencia, los puntos azules muestran el dióxido de carbono emitido por el mismo país/ la misma región en 2017 (datos anuales completos disponibles más recientes). Algunos gobiernos están tratando de revertir sus políticas rápidamente para volver a encarrilarse hacia la consecución del objetivo, pero este no es el caso en todos los países. Entre sus iniciativas, se incluyen inversiones en proyectos respetuosos con el clima que influyen sobre el comportamiento mediante la imposición de impuestos y reglamentos.
Muchas de las nuevas normativas se centran específicamente en el papel que los mercados de capitales deberían jugar en la aportación de soluciones. En marzo de 2019, el Parlamento y el Consejo de la UE introdujeron un nuevo reglamento para garantizar la coherencia, la divulgación de información y la transparencia en las actividades de los asesores y participantes de los mercados financieros en los estados miembros de la UE. Dicho reglamento establece la forma en que los riesgos y oportunidades de ESG deben integrarse en sus procesos como parte de su deber de actuar en pos de los intereses de los clientes.
En junio de 2019, se proporcionaron datos adicionales cuando el Grupo de Expertos Técnicos (TEG, por sus siglas en inglés) de la Comisión publicó sus recomendaciones finales para la elaboración de una «taxonomía» de actividades medioambientalmente sostenibles. El informe principal describe criterios técnicos para la selección de 67 actividades económicas que pueden realizar una importante contribución a la mitigación del cambio climático. De acuerdo con esta nueva normativa, los gestores de activos que comercialicen productos calificados como «medioambientalmente sostenibles» deberán ahora explicar y divulgar información sobre la relación que guardan con estas 67 actividades.
Aunque el actual gobierno estadounidense se ha retirado del Tratado de París, sería erróneo suponer que el cambio climático no constituye una prioridad a escala nacional. El Gráfico 2 muestra que el número de resoluciones de juntas de accionistas estadounidenses en las que el cambio climático es un tema principal viene incrementándose de forma gradual. Puesto que la mayoría de expertos en cambio climático coinciden en que los siguientes 10 a 20 años serán cruciales para limitar sus efectos, prevemos que las políticas gubernamentales en este ámbito se incrementarán exponencialmente a corto plazo conforme las amenazas para el medio ambiente van aumentando.
Más allá del cambio climático, las cuestiones sociales son otro factor que influye sobre las políticas de los gobiernos. Uno de los corolarios de la lentitud del crecimiento durante esta etapa de expansión ha sido la mediocre ampliación de los salarios reales, especialmente entre las clases media y baja. A este respecto, sospechamos que las políticas sociales –como los ingresos mínimos vitales y la capacitación en el trabajo– serán un componente cada vez más relevante de la política gubernamental en un gran número de países desarrollados.
En consecuencia, entender cómo las políticas gubernamentales relacionadas con los criterios ESG afectarán a las ganancias corporativas tiene una importancia creciente a la hora de valorar adecuadamente las acciones de una determinada empresa.
Actitudes sociales
Los criterios ESG están influyendo sobre el comportamiento de los consumidores y los inversores. La reciente aversión a los plásticos de un solo uso es un ejemplo de cómo la concienciación puede tener un impacto notable sobre las conductas de consumo. Además, los ahorradores prefieren poner sus ahorros a producir de formas que se ajusten a sus valores sociales. En una encuesta reciente, un 87% de los encuestados nacidos en el nuevo milenio (los comúnmente denominados «millennials») hizo referencia a la importancia de los criterios ESG en sus decisiones de inversión.
Podéis consultar el informe completo haciendo click