12 de marzo de 2019
Estimados inversores,
En febrero, los mercados bursátiles han mantenido la positiva evolución del mes anterior. El Euro Stoxx 50 ha registrado un avance mensual del 4,4%, acumulando una rentabilidad positiva desde inicio de año del 9,9%
El valor liquidativo de Abante European Quality se ha incrementado en mayor medida: un 7,9% en febrero y un 15,5% desde principios de año. Desde su nacimiento, en mayo de 2013, nuestro fondo acumula una rentabilidad positiva del 34%, frente a una revalorización del 17% del Euro Stoxx 50 en el mismo período.
A cierre de febrero se han publicado ya la práctica totalidad de los resultados de las grandes empresas cotizadas en 2018. En general, han respondido a las expectativas de los analistas, sin grandes sorpresas en el último trimestre, que no ha mostrado una tónica muy distinta de la registrada en los trimestres anteriores. Las caídas bursátiles de finales del año anterior no se corresponden con un empeoramiento apreciable de la actividad real de las empresas. Y, en lo que concierne a las expectativas, que es lo que el mercado suele descontar, tampoco aparecen sorpresas apreciables. Así, los objetivos para 2019 establecidos, tras la publicación de los resultados anuales de 2018, por la mayor parte de compañías, son los que corresponden a unas expectativas de crecimiento de la economía global próximo al 3% (1% en Europa, 2% en América, 5% en Asia), en línea con lo que podríamos considerar un año de crecimiento medio.
A finales de este mes vencía, en principio, el plazo que se habían otorgado China y Estados Unidos para resolver sus disputas comerciales. No hay acuerdo definitivo, pero ambas partes han extendido indefinidamente el vencimiento de dicha negociación, lo que ha llevado al mercado a descartar cada vez más la posibilidad de una guerra comercial.
En su reunión de marzo, el BCE ha anunciado un nuevo programa de financiación a la banca (TLTRO) que debería despejar las posibles dudas sobre eventuales tensiones de liquidez para los bancos europeos durante los dos próximos años, facilitando la concesión de préstamos, incluso para aquellas entidades son una financiación minorista (depósitos de clientes) inferior a su masa de inversión crediticia. Ello debería incidir en una menor percepción de riesgo y, por ende, contribuir a elevar los bajos múltiplos sobre el beneficio actual (de por sí, en un entorno de tipos cero, excepcionalmente bajo) a los que cotizan.
Los mercados ya cotizaban desde hace más de medio año una dilación en el proceso de normalización de tipos de interés, por lo que la fijación de diciembre (en lugar de septiembre), como nueva fecha objetivo para estudiar una primera subida de tipos no debería ser acogida con sorpresa.
Hoy, martes 12 de marzo, el parlamento británico votará si acepta el acuerdo (matizado por una declaración adjunta) de May con la Unión Europea para el Brexit. Es probable que no reciba, todavía, el apoyo mayoritario de la cámara. Si así fuera, mañana se votaría la posibilidad de descartar un Brexit sin acuerdo, y pasado mañana, los términos (concretando plazos) en los que el Reino Unido solicitaría a la Unión Europa una extensión del período de negociación.
En definitiva, no sabemos todavía si a final de marzo se acabará la tragicomedia o, sencillamente, será solo el inicio de un nuevo acto. Pero lo que parece bien claro es que no va a haber una salida desordenada de la Unión Europea por parte del Reino Unido. El mercado, probablemente, agradecería más la ratificación del Brexit ya acordado, que una prórroga en la indefinición. Pero, en todo caso, si se descarta una ruptura brusca (y para ello, faltan solo dos días), la disminución de la percepción de riesgo debería ser clara. La banca sería, en este caso, como en general en todos los que afectan a riesgos genéricos, de carácter político, la más beneficiada en sus cotizaciones.
En enero hemos realizado un cambio en nuestra cartera, vendiendo Telefónica y comprando BBVA. Deshacemos nuestra posición en Telefónica, integrada en la cartera hace algo más de un año, con una leve ganancia. Es un valor que presenta un potencial cierto, pero relativamente moderado, sin que preveamos, tras la publicación de resultados, un incremento del dividendo en un plazo medio. Y, en su lugar, volvemos a incorporar a la cartera a BBVA, a un precio un 25% inferior al que lo vendimos hace dos años. Nada ha cambiado sustancialmente desde entonces desde un punto de vista de valoración fundamental. Solo el precio que, ahora, vuelve a ser realmente muy atractivo.
Muchas gracias por su confianza,
Josep
Descubre los mejores brókers y exchanges de 2025
Te contamos los mejores exchanges de criptomonedas y los mejor brókers para empezar a invertir online.