Subida de tipos del BCE: así afectará a los ahorradores
El Euríbor cumple cinco años como un calcetín del revés. El 5 de febrero de 2016 cotizó por primera vez en negativo. Un lustro que ha roto con los cánones del sistema financiero: los clientes bancarios conseguían intereses para el dinero que tenían depositado en el banco. Y la entidad cobraba a los usuarios por pedirlo prestado.
Los entendidos vaticinaron que el índice de referencia del mercado hipotecario estaría en terreno negativo poco tiempo. En cambio, la excepción se ha convertido en norma y algunos expertos visualizan un Euríbor con signo menos delante hasta finales de esta década. El relato puede estar a punto de cambiar. La Reserva Federal, el banco central de Estados Unidos, anunció subidas de tipos de interés este 2022. Estos últimos días el Banco Central Europeo (BCE) ha dejado la puerta abierta a hacer lo propio.
La alta inflación está llevando a Christine Lagarde, banquera central del supervisor europeo, a replantearse su postura de los últimos meses. Sería la primera subida de tipos de interés y los ahorradores e hipotecados se enfrentan a cambios.
Tipos de interés: qué son
"En vista de la incertidumbre actual, necesitamos más que nunca mantener la flexibilidad y la opcionalidad en la conducta de la política monetaria", expresó la semana pasada Lagarde, que, no obstante, añadió: "El Consejo de Gobierno del BCE está preparado para ajustar todos sus instrumentos para asegurar que la inflación se estabiliza en su objetivo del 2%".
Los tipos de interés son 'grosso modo' el precio del dinero. Un particular que toma prestado dinero para comprar una casa o para financiar un coche nuevo soporta un extra por parte de su entidad financiera. Es decir, el banco nos cobra un porcentaje adicional por el riesgo que está asumiendo al prestarnos dinero y confiar en que seremos solventes para devolverlo en un futuro. También hay un tipo de interés en el dinero depositado en una cuenta corriente. Aunque, en ese caso, normalmente la entidad paga a los usuarios un pequeño porcentaje para poder hacer uso de él.
Ahora bien, los tipos de interés oficiales, que son los que modifica el BCE según cómo marcha la economía, no son exactamente los mismos de la relación cliente-banco. Son, en cambio, los que rigen en la relación entre entidades financieras y el banco central: el BCE exige un extra monetario a las entidades que acuden al supervisor europeo para pedir liquidez, ya que están retirando dinero de sus reservas.
Pero, ¿en qué afecta a la economía de las familias un cambio de tipos del BCE? Son la herramienta principal de los bancos centrales para influir sobre la economía. Es por eso que una subida o una bajada condiciona el valor de un puñado de otros tipos de interés que operan diariamente en la economía. Entre ellos, el Euríbor, que es el gran índice de referencia de los precios hipotecarios. Es decir, el medidor de cómo de barato o caro será para una familia pedir un préstamo para comprar una casa.
¿Hipoteca a tipo fijo o a tipo variable?
Cómo afecta una subida a hipotecados y ahorradores
Las personas con una hipoteca a tipo variable serán quienes más noten la revisión al alza de los tipos. Frente a los pagos de la hipoteca de los últimos meses, con un Euríbor hundido, la subida de tipos empujará el índice hacia arriba y también las cuotas mensuales a pagar.
Los hipotecados a tipo fijo corren mejor suerte: las condiciones, como indica el nombre de esta modalidad de hipoteca, permanecerán invariables aunque el BCE levante la mano. Es decir, que los interesados en comprar casa tienen los días contados para contratar a tipo fijo con unas condiciones favorables como las de los últimos años. De hecho, las hipotecas a tipo fijo se habían convertido en el campo de batalla de los bancos. Este cambio del BCE que se empieza a avistar tendrá consecuencias en la oferta de los bancos.
Los ahorradores, por su parte, se verán beneficiados. La gran mayoría de los españoles guardan sus ahorros en productos financieros conservadores, como cuentas corrientes y depósitos. Vehículos que ofrecen tradicionalmente rentabilidades bajas y más con los tipos en negativo estos últimos años. En estos momentos, los ahorradores recibían una rentabilidad media del 0,02% por las cuentas a la vista, de acuerdo con el Banco de España. Un beneficio muy por debajo del nivel de inflación (6% según el dato adelantado de enero del INE).
Una forma de conseguir ahorros extra para pagar la entrada de la vivienda es a través de inversiones en activos seguros y poco volátiles. Con el paso del tiempo, el particular genera una bolsa de ahorro que hará más liviano el pago de la hipoteca. Finect recoge en un escaparate de riesgo bajo algunas inversiones que ayudarán a cumplir ese objetivo.
La versión original de este artículo se publicó en la edición web de La Información el 8/2/2022.
