Beneficios y riesgos que afrontan los inversores de renta variable global
El aumento de la amplitud y la volatilidad del mercado en un contexto económico resistente debería crear oportunidades para los gestores de fondos activos.
El escenario más probable es un aterrizaje suave de la economía estadounidense. Esperamos que los mercados de renta variable se vean respaldados a medio plazo por un modesto crecimiento de los beneficios empresariales. En Europa, la inflación se ha mantenido a la baja a medida que la eurozona y el Reino Unido han salido de recesiones poco profundas.
Esto le ha permitido al Banco Central Europeo empezar a recortar los tipos de interés. También estamos observando un mayor crecimiento de los salarios reales en Europa y el Reino Unido, lo que, combinado con un exceso de ahorro, debería apoyar aún más el crecimiento del consumo.
La corrección del mercado de agosto supuso una depreciación de la renta variable como reflejo de unas perspectivas más inciertas para la economía estadounidense, pero rápidamente las acciones han recuperado las pérdidas, apoyadas por el buen crecimiento de los beneficios empresariales y las perspectivas de unas condiciones monetarias más favorables. Destacamos cinco aspectos a tener en cuenta por los inversores de bolsa.
1. Valoraciones globales favorables fuera de EE.UU.
El Reino Unido sigue siendo uno de los mercados más atractivos del mundo en relación con su historial a largo plazo. Las valoraciones siguen siendo favorables para los mercados no estadounidenses, además del Reino Unido, destacan Japón y los mercados emergentes (EM).
Sin embargo, las valoraciones en el mercado estadounidense parecen menos elevadas cuando se mira más allá de las acciones de crecimiento de megacapitalización de las «grandes tecnológicas», que están arrastrando al alza el múltiplo general del PER del S&P 500. Las «grandes tecnológicas» se han beneficiado en conjunto tanto de una exposición temática relevante como de unos fundamentales sólidos. Por el contrario, el resto del mercado se ha enfrentado a un entorno operativo aún difícil, que ha frenado el crecimiento de los ingresos y los beneficios netos durante gran parte de este tiempo.
2. Los factores que impulsan el mercado podrían multiplicarse
La amplitud de los mercados se ha mantenido en niveles extremadamente bajos durante el pasado año, ya que la gran mayoría de las ganancias del mercado han correspondido a un reducido grupo de valores. La estrechez de los mercados hasta la fecha ha sido consecuencia de factores top-down -la IA- y fundamentales bottom-up (el crecimiento divergente de los ingresos y los beneficios).
El consenso del mercado prevé ahora que esta brecha se cierre en cierta medida, con expectativas de que se produzca una aceleración del crecimiento de los beneficios para el mercado en general, y una desaceleración significativa para las grandes tecnológicas
Sin embargo, se espera que los beneficios de las grandes tecnológicas, sujetos a la disciplina de costes, disminuyan en los próximos trimestres. Esto acercará el crecimiento de los beneficios al del resto del mercado.
También hay razones para una ampliación de las rentabilidades de los mercados de renta variable a nivel regional. Las economías europeas serán más sensibles a los recortes de tipos de interés que la economía estadounidense, y en Japón los salarios reales han pasado a ser positivos tras muchos meses de contracción.
Estas regiones deberían verse aún más favorecidas por los recortes de los tipos de interés. Los consumidores europeos, en particular, están más expuestos a hipotecas a interés variable (en comparación con EE.UU.) y las empresas dependen más de los préstamos bancarios. Por el contrario, en Estados Unidos se ha pasado de controlar la inflación a evitar una recesión.
3. Las empresas japonesas, bien posicionadas para retribuir a los accionistas
Vemos una tendencia infravalorada de mejora de los beneficios que debería seguir apoyando a la renta variable japonesa. Tres décadas de deflación han llevado a empresas y particulares a acumular efectivo.
Ahora estamos asistiendo a reformas en curso, dirigidas por la Bolsa de Tokio y diversas instituciones gubernamentales, encaminadas a mejorar la gobernanza y la eficiencia del capital. Estas iniciativas deberían ayudar a poner a trabajar el exceso de efectivo y aumentar las excepcionalmente bajas tasas de inversión en renta variable en comparación con otros mercados desarrollados.
Este renovado interés por la productividad y la rentabilidad se ve respaldado por un contexto inflacionista que está llevando al Banco de Japón a alejarse del control de la curva de rendimientos en un momento en que la mayoría de los bancos centrales se inclinan por la relajación.
Creemos que esto debería proporcionar un mayor apoyo a la divisa, que ha erosionado las rentabilidades de los inversores extranjeros durante la mayor parte de la última década. Como consecuencia, deberíamos ver un mayor número de oportunidades atractivas en empresas centradas en el mercado nacional.
4. Elecciones en EE.UU.: potencial volatilidad, pero priman los fundamentales
En general, las políticas y las diferencias políticas de los candidatos demócratas y republicanos siguen siendo escasas en áreas clave, mientras que una mayor claridad podría quizás servir para aumentar la volatilidad a corto plazo en lugar de reducirla. Dicho esto, allí donde las diferencias son evidentes -aranceles comerciales, política energética, desregulación bancaria, precios de los medicamentos- creemos que las implicaciones son claras. En cualquiera de los dos escenarios, esperamos ver políticas comerciales que alejen las relaciones de EE.UU. de sus rivales y que den prioridad al avance del liderazgo de EE.UU. en las industrias de alta tecnología.
La historia ha demostrado que posicionar las carteras en torno a quién se cree que va a ganar unas elecciones es casi siempre una estrategia perdedora, y siempre es importante diversificar el riesgo. Por supuesto, esto no quiere decir que ignoremos los posibles riesgos políticos, pero creemos que es más importante seguir centrados en las perspectivas de la economía, la dirección de los tipos de interés, las previsiones de crecimiento de los beneficios y el atractivo relativo de las valoraciones.
En nuestras carteras preferimos tener empresas que controlen su propio destino.
5. Mayor control en torno a la monetización de la IA
La euforia en torno a la IA generativa ha sido uno de los principales motores del crecimiento del precio de las acciones en los mercados durante el año pasado. Los inversores han acudido en masa a algunos de los claros beneficiarios en los segmentos de semiconductores y centros de datos.
Sin embargo, los ingresos procedentes de la IA se acercan a un nivel que se estima 10 veces inferior a la cantidad de gasto de capital que se está invirtiendo actualmente. Como resultado, existen dudas sobre si habrá suficientes ingresos futuros a corto plazo para justificar el nivel actual de construcción de infraestructuras.
Somos plenamente conscientes de que la IA generativa sigue siendo incipiente y de que el desarrollo de esta tecnología encierra un enorme potencial para transformar las empresas y la productividad. Sin embargo, ahora se enfrenta a un mayor control en torno al nivel de consumo de energía, las limitaciones de suministro y el ritmo de crecimiento de los ingresos.
Información importante: Los puntos de vista y opiniones aquí contenidos son los de Simon Webber, director de renta variable global de Schroders, y pueden no representar necesariamente puntos de vista expresados o reflejados en otras comunicaciones, estrategias o fondos de Schroders. Este material tiene únicamente fines informativos y no pretende ser material promocional en ningún sentido. El material no pretende ser una oferta o solicitud de compra o venta de ningún instrumento financiero. El material no pretende proporcionar asesoramiento contable, jurídico o fiscal, ni recomendaciones de inversión, y no debe utilizarse como tal. No debe confiarse en las opiniones e información contenidas en este documento a la hora de tomar decisiones individuales de inversión y/o estratégicas. Las rentabilidades pasadas no son indicativas de rentabilidades futuras y no pueden repetirse. El valor de las inversiones y los ingresos derivados de las mismas pueden bajar o subir, y es posible que los inversores no recuperen las cantidades invertidas originalmente. Todas las inversiones implican riesgos, incluido el riesgo de una posible pérdida de capital. La información contenida en este documento se considera fiable, pero Schroders no garantiza que sea completa o exacta. No debe confiarse en las opiniones e información contenidas en este documento a la hora de tomar decisiones individuales de inversión y/o estratégicas. Las opiniones contenidas en este documento incluyen algunas previsiones. Creemos que basamos nuestras expectativas y convicciones en supuestos razonables dentro de los límites de lo que podemos esperar.