"Se necesitaría una sorpresa significativa para que el BCE no recorte en junio"
No hubo sorpresas en la ciudad de Fráncfort (Alemania). El Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo decidió este jueves mantener la actual política monetaria y dejar sin cambios los tipos de interés. Este era el escenario esperado por la mayoría de analistas.
"El BCE decidió mantener sin cambios todos sus tipos de interés oficiales, manteniendo su tipo de interés por quinta reunión consecutiva. La decisión era ampliamente esperada por todos los participantes del mercado y tomada por una gran mayoría, según informó Christine Lagarde durante la conferencia de prensa", han explicado François Cabau y Hugo Le Damany, economistas en la gestora de fondos AXA Investment Managers sobre la reunión.
Asimismo, tanto el comunicado de la institución como la propia Lagarde en la rueda de prensa no quisieron comprometerse con una hoja de ruta. "Tanto la declaración de política monetaria como la conferencia de prensa fueron consistentes en evitar hacer comentarios sobre la futura senda de tipos", han asegurado.
La presidenta de la autoridad monetaria reiteró la dependencia de los datos en la toma de decisiones de política monetaria por parte de la institución. "Lagarde reiteró el mensaje de que se publicarán muchos datos antes de la reunión de junio. Más allá de la disección habitual de la inflación mensual, las series trimestrales, como los salarios negociados, la productividad laboral y los beneficios unitarios, estarán disponibles para el primer trimestre", han señalado.
"Serán fundamentales para comprobar si las dos hipótesis clave del BCE realizadas en marzo seguirán siendo correctas: el repunte previsto de la productividad laboral, la reducción de facto de los costes laborales unitarios y la evidencia de que los menores beneficios empresariales absorberán el aumento de los costes laborales", han añadido.
Los analistas creen prácticamente inevitable que el BCE apruebe una primera bajada del precio del dinero en la reunión de junio. "A pesar de la importante dependencia de los datos del BCE, creemos que se necesitaría una sorpresa significativa al alza para que el BCE no recorte en junio", ha afirmado.
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