Fondos indexados, una de las inversiones favoritas de los españoles: ¿cómo tributan en la Renta?

Los fondos indexados y los roboadvisors son los principales productos financieros de la gestión pasiva, una manera de invertir que ha ganado mucho peso en los últimos años en Estados Unidos y en España.

Los fondos índice han perdido algo de popularidad durante el último año. La categoría de inversión "gestión pasiva" acaparaba el 4,4% del patrimonio de los fondos de inversión en España en 2021, según datos de Inverco. Un año después, la estadística provisional muestra que su peso relativo ha caído hasta el 3,5% del total del dinero gestionado en fondos.

Sin embargo y contra lo que suele ocurrir en la vida real, los datos más desactualizados o antiguos aportan una imagen más real en la declaración de la Renta, cuya campaña comienza este miércoles. Desde este día ya se puede presentar la autoliquidación del IRPF ante la Agencia Tributaria.

Vistas las estadísticas, durante 2021 los fondos indexados -ya sea contratados directamente desde una comercializadora o dentro de una cartera de fondos indexados de un roboadvisor- eran un vehículo de inversión en auge por el que ahora los contribuyentes deben rendir cuentas. Algunos ejemplos de productos de gestión pasiva en España son las carteras Smart Money de CaixaBank y los roboadvisors Indexa Capital y MyInvestor.

Cómo tributan los indexados en España

Los fondos indexados y los fondos cotizados (ETF) pueblan las carteras de los inversores pasivos y de los roboadvisors. Como cualquier otro producto de inversión, deben tributar en la Renta. La fiscalidad es una de las claves para determinar la rentabilidad real de una inversión.

La fiscalidad de los indexados es la misma que la de cualquier otro fondo de inversión. Es decir, que la diferencia entre estos y los fondos de gestión activa es nula a ojos de la Agencia Tributaria. Tributan en el IRPF dentro de las rentas del ahorro como parte de las ganancias y pérdidas patrimoniales, que también incluyen las acciones, CFDs y la mayoría de inversiones.

Los fondos de gestión pasiva cuentan con una ventaja que no poseen otros productos financieros y que afecta al momento de pagar impuestos. El contribuyente puede aplicar la exención por traspaso que aplica a los fondos de inversión. Esto se traduce en que el impuesto se puede pagar cuando se hace la venta del fondo indexado para luego usar ese dinero en la compra de participaciones de otro fondo.

Traducido a un ejemplo supone que un inversor particular traspasa el fondo indexado Vanguard Global Stock Index Fund y las ganancias las reinvierte en un segundo fondo, como el Imantia Ibex 35 FI, estas no tributarán en la Renta y se ahorrará pagar entre un 19% y un 26% de impuestos por los beneficios.

Desde un punto de vista práctico, diferir el pago de impuestos o no al cabo de 5 años para una inversión de 10.000 euros con un 4% de rentabilidad supera los 338 euros. Llevado al largo plazo, en 20 años y sólo en concepto de intereses, el fondo indexado habrá generado 1.025,3 euros gracias a esta ventaja, por los 858,7 euros de otro tipo de inversiones que paguen impuestos cada año.

Impuestos a pagar por los fondos indexados

Los fondos indexados están sujetos a los tipos del ahorro, que se dividen en cuatro tramos en la Renta 2021 (que presentarán en los próximos meses unos 21 millones de residentes en España):

- 19% por beneficios de menos de 6.000 euros

- 21% por beneficios de entre 6.001 y 50.000 euros

- 23% por beneficios de 50.001 a 200.000 euros

- 26% por beneficios mayores de 200.001 euros

Ese es el dinero que el contribuyente paga efectivamente, pero antes la gestora ya ha hecho la retención antes de ingresar el dinero al inversor.

¿Qué casillas tengo que utilizar en mi declaración de la renta?

La versión original de este artículo se publicó en elEconomista el 7 de abril de 2022.