Lejos del "pinchazo": la vivienda usada subirá un 5% en 2024 y la nueva un 6%, según AEV
Los expertos ven cada vez menos probable un temido "pinchazo inmobiliario". No solo eso, sino que además esperan incluso más subidas. Los precios de la vivienda usada aumentarán hasta un 5% a finales de año, mientras que los de la vivienda nueva subirán un 6%, según la Asociación Española de Análisis de Valor (AEV).
Se espera que los precios de las viviendas usadas aceleren su crecimiento hasta el 5% a finales de 2024. Por otro lado, los precios de las viviendas nuevas podrían incrementarse hasta un 6% a mediados de año, con un crecimiento más moderado hacia finales de año.
De acuerdo con el 'XX Observatorio de la Valoración' de la AEV, que examina datos del primer trimestre de 2024, el aumento en los precios de la vivienda usada dependerá de la consolidación de la disminución de los tipos de interés, facilitando el acceso al crédito para las personas con menores ingresos, y de la estabilidad o mejora de los niveles de empleo.
En cuanto a la vivienda nueva, el incremento de precios se debe a la escasez de nuevos productos, lo que tiende a elevar los precios. Este efecto podría ser más notable en áreas costeras con alta actividad turística y en grandes ciudades y sus áreas metropolitanas.
El alquiler seguirá subiendo, al 12,5%
Según la AEV, los precios del alquiler seguirán creciendo a un ritmo similar al actual, con un aumento anual promedio del 12,5% en toda España. Esto se debe a la creación de nuevos hogares por encima de las expectativas debido a los flujos migratorios y la consecuente demanda de viviendas frente a una oferta limitada. Otros factores incluyen el alquiler turístico y la demanda territorial desigual, con algunas áreas experimentando mayor presión.
La estabilización de la recuperación económica ha fomentado la movilidad de la población, contribuyendo al aumento de precios en todo el país. Sin embargo, el 80% de los expertos internos y el 60% de los externos creen que esta no es la única causa, señalando también la falta de oferta, la movilidad laboral de los jóvenes, el incremento en la creación de nuevos hogares con diversas necesidades y la compra de viviendas por extranjeros, además de la dificultad para acceder al crédito para la compra de la primera vivienda.
También se ha observado una diferencia en el aumento de precios entre contratos de alquiler vigentes y nuevos, con los primeros aumentando un 5% anual en promedio y los segundos un 10%, debido a la limitación en la actualización de rentas.
La Ley de Vivienda no ayudará a bajar precios
El 90% de los panelistas internos y el 60% de los externos del observatiro descartan que las restricciones de la Ley de Vivienda reduzcan los precios del alquiler más allá del corto plazo inicial. Estas medidas tienden a restringir la oferta, exacerbando el problema subyacente del aumento de precios y generando distorsiones inesperadas en otros ámbitos.
Incluso aquellos que creen que la ley tendrá un efecto positivo piensan que la reducción de precios será de corto plazo, con consecuencias inciertas a medio y largo plazo.
La compraventa de viviendas se recuperará
El 'XX Observatorio de la Valoración' prevé un aumento en las transacciones de vivienda en respuesta al incentivo de inversión derivado de la contención de la inflación, tras caer un 11% en 2023, llegando a 639,000 transacciones.
El 70% de los panelistas externos y el 40% de los internos anticipan un aumento en el volumen de transacciones en los próximos trimestres, gracias a la esperada relajación de las tasas de interés, el aumento gradual de los salarios, la recuperación de las tasas de ahorro y un mercado laboral fuerte.
El mercado hipotecario es insuficiente
El informe señala que, con la demanda existente, el mercado hipotecario en España es insuficiente, habiendo reducido su tamaño en un 40% desde 2008. La falta de apoyo financiero para la compra de viviendas es un obstáculo para el aumento de la oferta.
Algunos expertos sostienen que la principal barrera para la construcción de nuevas viviendas no es la financiación, sino la escasez de suelo disponible y las regulaciones que dificultan la promoción inmobiliaria. Además, la fragmentación del sector promotor limita la capacidad de compra de suelo y el inicio de nuevos proyectos.
Paloma Arnaiz, secretaria general de la AEV, afirma que los problemas estructurales del mercado inmobiliario en España siguen impidiendo un equilibrio entre oferta y demanda, manteniendo la tensión en los precios de las principales ciudades. Urge implementar planes a medio y largo plazo para corregir la escasez de oferta tanto en venta como en alquiler.
Este contenido se ha elaborado parcialmente con inteligencia artificial, bajo un criterio editorial y no constituye una recomendación ni propuesta de inversión. La inversión contiene riesgos. Las rentabilidades pasadas no son garantía de rentabilidades futuras.